Si sospechas que tu perro o gato están enfermos debes pensar dos veces antes de darle algún medicamento que tengas disponible en tu hogar. Muchos de ellos tienen resultados fatales.
¿Sabías que muchos medicamentos son tóxicos para nuestras mascotas? Aunque las personas compartimos muchas características biológicas y metabólicas con perros y gatos, existen diferencias específicas que nos distinguen entre especies y nos otorgan la capacidad de poder asimilar un medicamento sin que resulte tóxico. Por este motivo las mascotas tienen su propia farmacia y es importante que te informes acerca de todos los remedios que nunca debes administrarles.
¿Cuáles son los más tóxicos? Entre las causas más frecuentes de intoxicaciones encontramos a los medicamentos antiinflamatorios humanos, ya que muchos propietarios se ven "tentados" en administrarlos cuando sospechan que su mascota está enferma y recurren a los que tienen disponibles en sus hogares. A continuación, te nombramos los más destacados:
Aspirina: se utiliza para evitar que las células sanguíneas, que intervienen en los procesos de coagulación denominadas plaquetas, puedan adherirse a las superficies y formen coágulos. Las mascotas son incapaces de eliminar este compuesto de la sangre, por lo que esta función se prolonga en el tiempo, incrementando los riesgos de sufrir hemorragias.
Ibuprofeno: este medicamento se utiliza para reducir la inflamación, se metaboliza y se elimina a nivel de los riñones, por lo que cuando nuestras mascotas lo ingieren se concentra en estos órganos, ocasionando daños importantes hasta volverlos incapaces de continuar con sus funciones. Sus efectos erosivos de la mucosa gástrica generan úlceras de estómago y vómitos, por lo que agravan aún más la situación.
Naproxeno: Sus efectos son similares a los ocasionados por el ibuprofeno y se utiliza en las personas con los mismos fines, aunque la acción de este fármaco es más potente y duradera con respecto a este último, por lo tanto, si perros y gatos ingieren este medicamento, los daños serán aún más significativos.
Paracetamol: también se receta con frecuencia en los seres humanos para aliviar la fiebre y aunque afecta a ambas especies, las consecuencias de la intoxicación son más graves en gatos. Este medicamento, a diferencia del ibuprofeno, es metabolizado en el hígado y sus daños se concentran en dicho órgano.
Existen además otros medicamentos capaces de generar daños, por lo que siempre que sospeches que tu mascota se encuentre enferma, debes consultar con tu veterinario de confianza antes de "automedicarla".
Y recuerda que si tienes un cachorro en casa, requieren de un cuidado especial ya que son los más traviesos y susceptibles a intoxicarse con medicamentos de uso humano.