Las profesionales de la Medicina y Enfermería lamatritenses participaron del Cosapro y contaron la experiencia. La doctora Patricia Sanz detalló el proyecto sobre chi kung y mindfulness que viene desarrollando.
En el mes de abril se desarrolló el Congreso Provincial de Salud. Participaron las autoridades sanitarias nacionales, bonaerenses, secretarios y secretarias de Salud de los 135 municipios y equipos sanitarios de toda la provincia. General La Madrid estuvo representado por autoridades, pero también concurrieron la doctora Patricia Sanz junto a las enfermeras Mariana Taliavachi y María Weimpender que trabajan en Salas de Atención Primaria.
"Era el primer Congreso que participaba y me encantó. Se discutieron nuevas estrategias para beneficio de la gente y de los trabajadores de la salud, y que haya verdadera accesibilidad para todos", sintetizó Taliavachi sobre el encuentro que se llevó a cabo en Mar del Plata.
Por su parte, la doctora Sanz recalcó que "la temática giró en torno a la Ley de Salud para integrar el sistema que está fragmentado".
"El Estado invierte muchísimo dinero en salud que no llega a la gente y se va por los grandes intereses corporativos que hay con el negocio de la enfermedad, el complejo médico industrial farmacéutico. Este proyecto busca que el Estado tenga mayor regulación", explicó luego.
Además durante el Cosapro se trabajó en la problemática de la atención primaria de la salud. "(Se abordaron) la promoción y la prevención, que redunda en una mejor salud para que las personas no lleguen a los hospitales", contó Sanz, y mencionó que "ese trabajo nosotros lo venimos haciendo hace un montón pero no se valora mucho ni se tiene en cuenta a la hora de adjudicar recursos y acompañar. Se prioriza el segundo nivel, la internación, que es una máquina que no para nunca y ahí no se puede evaluar el nivel de salud de la gente".
"El porcentaje que se destina a APS es muy poco en comparación con el que se brinda al segundo, a la internación. Una vez un ministro dijo que nosotros éramos un gasto; pero es al contrario, porque acá se hacen los diagnósticos precoces para no generar gastos, y que se haya reconocido nuestra labor es maravilloso", indicó la Licenciada en Enfermería.
Las profesionales valoraron además "las ponencias sobre las estrategias que se utilizaron en pandemia para dar respuesta a la gente".
Pandemia y después
"No han cambiado las estrategias de llegada a la gente lo que sucede es que la pandemia afectó en todos los aspectos. Durante dos años se priorizó la atención de la pandemia y quedaron muchas cosas pendientes: la gente no consultaba, no se hicieron los controles y no le prestaba atención a otros problemas. Ahora hay que retomar esas cuestiones", contaron Patricia Sanz y Mariana Taliavachi sobre cómo impactó el Covid en la población y la labor de los CAPS.
"Hasta antes de la pandemia trabajamos mucho en estadística y ahora estamos retomando el trabajo porque, por ejemplo, hay mujeres que han dejado de hacerse los estudios que son prácticas que permiten curar", indicaron luego.
El trabajo que no se ve
"En el primer nivel de atención podemos hacer muchísimo por la salud de la gente. No es todo emergencia o una ambulancia. En APS se trabaja muchísimo para que no haya internaciones", subrayó la enfermera.
Las profesionales insistieron en la necesidad de contar con recursos materiales y humanos en las Salas. "Así podríamos hacer un mayor despliegue territorial y cuidar mejor la salud", mencionaron. "Falta recurso humano e inversión. Nosotros hacemos mucho trabajo de prevención y promoción: hacemos talleres, venimos trabajando por los derechos de las mujeres, en salud reproductiva... nosotros empezamos a trabajar con niñas muy chiquitas y estamos ahí viendo de qué forma ayudar", contó Taliavachi.
"Nosotros vamos a buscar a la gente. Somos un equipo porque Rodrigo (Siri) que trabaja en la recepción, escucha mucho a la gente y está atento a las necesidades. Eso debería ser así en todos lados, con equipos fijos, y se trabajaría mucho mejor", sumó Patricia Sanz.
"Hacemos mucha prevención que son acciones específicas de atención primaria y nos gusta. Nosotros sabemos para qué estamos y tratamos de generar cosas", resumió.
"Tuvimos que volver a reacomodarnos porque la gente se alejó. Quedó gente que no se hizo un PAP, niños que no completaron su esquema de vacunación, y así con todo. Salimos nuevamente a captar la gente y responden", señalaron a continuación.
"El trabajo en APS es apasionante. No muy difundido pero es apasionante, y lo hacemos con mucho amor. Nosotros nos tomamos para estar con la gente e interiorizarnos en lo que les pasa", planteó Taliavachi.
"El trabajo que hacen las enfermeras comunitarias es grandioso y no lo hace nadie más porque escuchan, se preocupan y acompañan", cerró Sanz.
La cabeza, vital
La doctora Patricia Sanz presentó durante el Congreso Provincial de Salud un trabajo sobre chi kung y mindfulness que viene desarrollando desde la época más compleja de la pandemia.
"Comenzamos en la sala del Fonavi. Cuando no podíamos estar en lugares cerrados nos íbamos a la plaza y aún con las restricciones fue creciendo. El propósito es ganar en salud y mejorar el proceso de enfermedad", resumió la especialista. Antes de la exposición en el Cosapro el proyecto había sido presentado en un Congreso de Medicina y obtuvo un premio.
"Son importantes generar estos espacios de salud. La gente se siente mucho mejor, se revitaliza y aumenta en ánimo, y mejora sus emociones", valoró.
"Yo concibo a la salud como una sola que depende de múltiples factores. Es un hecho social, histórico, cultural, económico, político... depende de todo esto y la salud mental no está dividida de la salud general. Está demostrado científicamente que si, por ejemplo, estás angustiado y estás atravesando una enfermedad tu estado empeora. Con las emociones positivas y los grupos de contención mejora. Las emociones son causa y consecuencia de la salud física", planteó Patricia Sanz.
"Durante la pandemia hice el seguimiento de pacientes y familiares, y se notaba la angustia y el miedo. En ese momento comenzamos con una médica de El Bolsón y un profesor de tai chi, a través de Instagram, con las clases de meditación y tai chi, también charlas para contener a los padres. Así estuvimos un año entero hasta que se pudo hacer presencial", repasó sobre el inicio del proyecto.
"La pandemia tuvo muchos aspectos negativos en la gente y no se estuvo contemplando esos efectos, por más que los psicólogos trabajaron un montón a ellos les llegaba la patología pero los miedos, el malestar, el dolor de los que no pudieron despedir a sus familias, por eso es importante estar y que se lo escuche y acompañe", señaló.
"Se aborda la salud de manera integral: la física, la espiritual, la emocional. El chi kung mejora la energía, pero además encontrarte con otras personas y hablar sirve para reconfortar. Nosotros nos sanamos con otros", cerró Patricia Sanz.