Frente al cambio en el clima, hay algunas personas que optan por consumir más dulces como chocolates, caramelos, galletas y otros alimentos para aumentar calorías, ya que se cree que el azúcar aporta calor a nuestro cuerpo. ¿Esto es verdad? Distintos médicos sostienen que es un mito creer que comer productos azucarados y carbohidratos nos protege del frío. Son las proteínas las que fomentan el metabolismo corporal elevando la temperatura del cuerpo.
Lo cierto es que el cacao posee aminoácidos que favorecen la producción de serotonina, un neurotransmisor que lleva a una señal nerviosa que produce felicidad. También cuentan con feniletilamina, relacionado con las anfetaminas, y con la anandamina, compuesto que activa receptores cerebrales que producen placer.
Es rico en minerales como potasio, magnesio y fósforo, así como ácido fólico y vitaminas del complejo B. Aunque se dice que el consumo de chocolate produce acné, puede ser falso, pues los antioxidantes que contiene ayudan a los vasos capilares y sanguíneos de la piel. Los chocolates estimulan el sistema nervioso y algunos de sus componentes pueden prevenir enfermedades degenerativas y propician el rendimiento intelectual.
Además, un estudio publicado en 2006 por el Journal of Sexual Medicine dice que el chocolate es a menudo, considerado como un afrodisíaco. La investigación realizada a 163 mujeres arrojó que aquellas que consumieron chocolate experimentaron mayor deseo y placer sexual que las que no lo hacían.