Néstor Daniel Morales tenía 53 años y era operario del Parque de Tecnologías Ambientales. De quién es la responsabilidad.
Según informó el Diario de Cuyo, un empleado del Parque de Tecnologías Ambientales dependiente del Complejo Ambiental San Juan llamado Néstor Daniel Morales perdió la vida mientras trabajaba como sereno en un puesto de control de ingreso y salida de camiones.
Ocurrió en la pequeña región de La Bebida, Rivadavia.
Tres trabajadores que hacían sus labores en las inmediaciones, escucharon de repente los gritos de socorro y de auxilio por parte de una persona en el puesto de control. De manera inmediata, acudieron hasta allí a bordo de una camioneta.
Al llegar, se toparon con la imagen de una jauría de entre 10 y 15 perros que estaba mordiendo y atacando a Morales.
De acuerdo a los testimonios de estos trabajadores, al llegar, los animales se resistían a soltar el cuerpo del empleado, aún cuando estos compañeros le tiraban la camioneta encima y le lanzaban piedras y objetos contundentes. Incluso, los testigos revelaron que los canes hasta intentaron atacarlos a ellos.
Una vez que pudieron liberar a Morales, lo subieron a la camioneta y llamaron de inmediato a una ambulancia. A unos pocos kilómetros de allí, hicieron el trasbordo para acudir a un hospital, pero el empleado murió antes de llegar a un centro de salud: había perdido demasiada sangre.
Este se trató del segundo caso de una víctima mortal de un ataque de una jauría en San Juan en los últimos 5 meses. Florencia Ledesma, una aspirante a policía de 23 años fue atacada por un grupo de canes en Villa Ampakama, en la localidad de Las Lomitas.
La muerte de Morales abrió un debate sobre el peligro de los pellos callejeros en zonas abiertas y sobre quién reposan las responsabilidades acerca del control de los animales.
"Estamos hablando de más de 70 perros que habitan ese predio. Hay una realidad muy lamentable que es de la ciudadanía desprendiéndose de esos animales. Es muy lamentable la situación. Estamos hablando de perros sin dueños arrojados durante años en ese lugar y que se alimentan de basura. Que están ahí a la buena de Dios y que a veces obran con este intento salvaje y producen estos resultados espantosos. Aún no pudimos dar con los perros", afirmó el fiscal Grassi.
A raíz de esta situación, los compañeros de Morales realizaron un paro y bloqueo de camiones. De hecho advirtieron que ya varios trabajadores fueron atacados por perros en el Parque y que todos sabían que una tragedia así iba a ocurrir en cualquier momento.
Este problema desató un cruce de acusaciones sobre responsabilidades en el hecho. El Secretario de Estado de Ambiente y Desarrollo Sustentable de San Juan, Francisco Guevara, advirtió en declaraciones a un canal local: "No sé si la falta de compromiso es directamente del municipio, porque sería señalar y es una problemática que viene desde hace décadas, pero en Rivadavia viene sucediendo desde hace tiempo y la mayoría son tragedias".
El funcionario informó que el problema de las jaurías ocurre porque en ese parque confluyen los residuos de 11 departamentos provinciales y esa basura atrae a los perros callejeros.
Y el Municipio de Rivadavia respondió mediante un comunicado:
"Ante los tristes sucesos ocurridos y ante las declaraciones efectuadas a través de las cuales responsabiliza a los municipios de la problemática de los "Perros Callejeros", y en particular al Municipio de Rivadavia por lo sucedido, nuestro municipio aclara que no tiene absolutamente ninguna responsabilidad de los hechos, siendo responsabilidad y competencia exclusiva de la Secretaría de Estado de Ambiente.