Con financiamiento de Nación, Ingeniería puede avanzar en un proyecto ambiental. Lo dirige la Dra. Paula Vitale, quien presentó el proyecto hace un año. ¿El objetivo?: estudiar las muestras frescas y sus posibles aplicaciones tecnológicas. "Ver qué se puede usar de los líquidos lixiviados, para la reinserción en el ciclo productivo de aquello que para nosotros es un deshecho".
"Si nosotros logramos extraer del lixiviado sustancias orgánicas y metálicas, podemos reutilizarlas para producir un montón de cosas tales como filtros de dióxido de carbono, gases de efectos invernaderos para efluentes industriales o ver si podría usarse para construir supercapacitadores para almacenamiento de energía. La idea que sea algo amigable con el medio ambiente".
La que habla es la Dra. Paula Vitale, docente e investigadora en la Facultad de Ingeniería, directora del proyecto "Captación de metales mediante complejación con sustancias húmicas en lixiviados de relleno sanitario: degradación de materia orgánica y extracción de metales para su reutilización o inertización" que está en marcha desde hace tiempo.
Ahora, recibió financiamiento de Nación, lo que posibilitará avanzar en un estudio que tiene como objetivo reinsertar en el ciclo productivo "aquello que para nosotros es un deshecho".
¿Desde dónde se parte? de muestras frescas que se obtienen de los líquidos lixiviados del relleno sanitario municipal antes que sean llevadas a su correspondiente tratamiento.
El financiamiento para este proyecto fue noticia justo cuando desde el Frente de Todos hacían público un informe de la Autoridad del Agua (ADA) sobre la creciente contaminación del arroyo Tapalqué, apuntando sobre todo al relleno sanitario local.
Yo no estoy estudiando el manejo del relleno sanitario ni la contaminación del arroyo. Lo que estoy haciendo a través de un convenio de trabajo con el Municipio es trabajar con las muestras frescas antes del tratamiento que hace el Municipio
Y es en este punto donde vale la aclaración, pues "yo no estoy estudiando el manejo del relleno sanitario ni la contaminación del arroyo. Lo que estoy haciendo a través de un convenio de trabajo con el Municipio es trabajar con las muestras frescas antes del tratamiento que hace el Municipio".
La iniciativa, básicamente, consiste en "trabajar con muestras frescas y las aplicaciones que creemos que tienen potencial y que pueden servir para el tratamiento. Lo que hacemos es probarlas en el mismo lixiviado para ver si pueden ser útiles. Es un proyecto e investigación, no se parece en nada al tratamiento de manejo de lixiviados".
Los rellenos sanitarios "son la tecnología más extendida en el mundo y en algunos casos la única aplicada para la disposición final de residuos. A pesar de la evolución en las tecnologías de relleno sanitario frente a los vertederos no controlados, éstos generan líquidos lixiviados que deben ser tratados antes de ser descargados en forma adecuada", explica Paula Videla, que desde agosto de 2020 trabaja en esta línea con su equipo y la Municipalidad de Olavarría a través de un acuerdo de colaboración.
La basura de la basura
Son muchas las cosas que podrían hacerse con algo que se tira y "la idea es que la ciencia apunte a buscar soluciones a largo plazo, esto viene de la mano de que tiramos mucho. El lixiviado del relleno sanitario es la basura de la basura, de alguna manera es un residuo que ya no tiene ninguna aplicación", explica la doctora en Ingeniería y docente de Química Analítica y Química Ambiental.
La idea es que la ciencia apunte a buscar soluciones a largo plazo, esto viene de la mano de que tiramos mucho
Cuenta que "este tipo de innovaciones que apuntan a la economía circular son de altos costos, pero si fueran posibles significarían una solución para todos los rellenos sanitarios del país. Uno lo que busca es trabajar en temas que después puedan llegar a la práctica. Apunto a poder tener en la mesa una solución que esté verificada científicamente".
En este camino, se trata de "encontrar qué hacer y saber con certeza que funciona. Uno tiene que hacer verificaciones de esto, después hay un gran camino por recorrer, pero estos temas vinculados a la economía circular y el medio ambiente tienen un gran auge. Creo que estamos apuntando a que las cosas mejoren con la esperanza que si funciona esto, se pueda aplicar y que pueda ser útil para alguien", detalla esta joven investigadora de 38 años.
¿Cómo es el proceso? Van al relleno sanitario estacionalmente -cuatro veces al año- donde les proveen las muestras frescas, antes de su correspondiente tratamiento, y trabajan sobre ellas en el laboratorio de Edemap (Equipo de Desarrollo de Materiales y Procesos) de la Facultad de Ingeniería.
Los desechos residenciales, comerciales, industriales y barros de plantas de tratamiento de aguas servidas conforman una mezcla con alto contenido orgánico e inorgánico. Y algunos de estos residuos orgánicos depositados se ven sometidos a procesos de transformación microbiana produciendo compuestos que tienen la capacidad de capturar metales. "Estas especies metal-húmicas son de particular interés para el proyecto, ya que si logramos extraerlas del medio podrían utilizarse en el tratamiento de efluentes, como materiales adsorbentes para la captura de dióxido de carbono y para la construcción de supercapacitores que almacenen energía".
La investigación contempla un trabajo de dos años, y un financiamiento de alrededor de 890 mil pesos.
"Es la primeras vez que accedo a este financiamiento donde hay que armar un proyecto y presentarlo", expone. La convocatoria que fue a nivel nacional asignó financiamiento para dos proyecto de la FIO, uno que es para un equipo de trabajo más formado y otro para el equipo que digire la Dra. Vitale, de investigadores que recién empiezan y que se completa con las Dras. Claudia Wagner, Marcela Bavio y Pamela Ramos; los becarios y alumnos de Ingeniería Química Julían Maragaño y Mercedes Fidalgo; los becarios doctorales Ing. Federico Poce, Ing. Florencia Jerez y Dr. Gastón Barreto; el Ing. Maximiliano Dellestesse; y la Dra. Alejandra Tironi.
La idea es abordar esta problemática de los lixiviados de manera inter-temática para tener las diferentes miradas
"Cada uno tiene distintas especializaciones en su trabajo porque la idea es abordar esta problemática de los lixiviados de manera inter-temática para tener las diferentes miradas".
Otro proyecto con financiamiento nacional
Además del que dirige la Dra. Videla, también llegó financiamiento para otra iniciativa de Ingeniería, con una adjudicación de 3 millones y medio de pesos a lo largo de tres años. Se trata de "Desarrollo de herramientas de diagnóstico online para transformadores" y estará digirido por el Ing. Carlos Verucchi.
La iniciativa propone avanzar en la detección de fallas en transformadores de potencia a través de métodos de aplicación on-line: "A partir del seguimiento de las variables eléctricas del transformador, tensiones y corrientes, se estudian distintas alternativas que permiten detectar fallas incipientes de diversas características. Con esto se busca evitar fallas repentinas que pongan fuera de servicio a un transformador e interrumpan el suministro de energía", detalló el docente de la FIO.
La experiencia consolida una línea de trabajo iniciada por el núcleo de investigación electricidad y mecatrónica (INTELYMEC) de Ingeniería y dentro de él por el LIDME (Laboratorio Industrial de Máquinas Eléctricas). Permitirá ampliar el alcance de los trabajos de investigación, previamente vinculados a máquinas de inducción y de imanes permanentes, y las actividades que el equipo de trabajo desarrolla en la industria regional. El proyecto además contempla la asignación de una beca de posgrado para la formación y trabajo de un/a profesional en la temática.
Ambos proyectos fueron seleccionados para recibir financiamiento por un monto superior a los 4 millones de pesos, en una convocatoria de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica.