Así lo estimó el presidente de la Federación Agraria Argentina, Carlos Achetoni. La merma se ubicaría en torno a los 6 millones de quintales. En San Juan, productores protestarán por el precio pagado por la industria
El clima no le está jugando una buena pasada al campo argentino, en especial a las actividades comprendidas dentro de las economías regionales. Sequías históricas, olas de calor extremas, granizadas y heladas tardías son el combo que algunas producciones tuvieron que afrontar y para las que los recortes en las proyecciones de cosecha están por convertirse en realidad.
Tal es la situación que en estos momentos está viviendo el sector viñatero, sobre todo en Cuyo, principal región productora de uva para la elaboración de vinos. Altas temperaturas, temporales con caída de granizo y heladas bien entrada la primavera pusieron en jaque a la producción, que ya se encontraba afectada por una sequía inédita, que puso en severo dificultades el riego que se realiza con aguas superficiales, modalidad de producción de la cual depende buena parte de la agricultura de la región.
En diálogo con Infobae, el presidente de Federación Agraria Argentina (FAA) y productor viñatero de Mendoza, Carlos Achetoni, consideró que la actividad está atravesando "una situación muy complicada" en especial por la falta de agua. "La crisis hídrica que hay de agua superficial es histórica y está afectando mucho" que sumada al granizo y a heladas tardías pueden "provocar una gran merma, entre el 30% o el 40%".
De esta manera, Achetoni ve la posibilidad de que, como piso, se produzca un recorte productivo cercano a las 6 millones de quintales respecto a la campaña anterior a solo semanas de que empiece la cosecha, sobre todo si se toma en cuenta que en 2021 se produjeron 19 millones de quintales. Este fuerte recorte, según el dirigente agropecuario, tendrá un impacto homogéneo en la región. "Algunas zonas pueden zafar porque han tenido menos granizo, como así también, aquellos productores que pudieron regar con perforación, pero, en general, el daño ha sido transversal y las memorias serán para casi todos".
Ante esta situación, la semana pasada el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca convocó a la Comisión Nacional de Emergencia y Desastre Agropecuario, la cual recomendó homologar a nivel nacional las emergencias que ya fueron declaradas en cuatro provincias, entre ellas Mendoza, cuestión que se encuentra a la espera de la firma del titular de la cartera agropecuaria, Julián Domínguez.
Pero los fuertes recortes productivos generalmente están acompañados por una suba de precios, tanto para el productor como para el consumidor. Esto último es lo más seguro, pero lo primero, el resarcimiento al productor, no siempre se lleva a cabo. Por eso, Achetoni sostuvo que la expectativa de los viñateros reciban 40 pesos por kilo o 4.000 por quintal, lo que supondría un aumento de casi el 25% de los 30 a 32 pesos por kilo de la actualidad.
Precios y protesta
En la denominada "zona norte" de producción de uvas, que integran las provincias de Salta, Catamarca, La Rioja y San Juan, la situación es la misma que en Mendoza. Según el último informe del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) se espera que la merma productiva en dicha región alcance el 8% respecto a 2021, al pasar de 6,4 millones de quintales recolectados el año pasado a 5,9 millones en los próximos meses, mientras que para San Juan, el segundo distrito en importancia en lo que respecta a la producción viñatera del país, esa caída puede crecer hasta el 10%.
Para el presidente de la Federación de Viñateros y Productores Agropecuarios de San Juan, Eduardo Garcés, la caída en la producción superará el 10% estimado por el INV, "fundamentalmente porque estamos atravesando una de las peores sequías de la historia de la provincia. Además hubo algunos vientos y olas de calor que estresaron las plantas, mucho más si no tienen agua".
No obstante el recorte productivo, que Garcés prevé de mayor envergadura, sostuvo que los precios pagados al productor no crecieron en la magnitud pretendida. "Nuestro principal parámetro de actualización es la inflación, que es del 50% a nivel nacional, pero hay insumos nuestros como un bidón de herbicidas que ha subido hasta un 500% o la mano de obra que subió 80%. En góndola nuestro producto tuvo un incremento del 120%, sin embargo a nosotros nos pagaron solo un 30% más".
Según el dirigente agropecuario, se están ofreciendo 24 pesos por kilo, cuando en la localidad salteña de Cafayate alcanza los 120 pesos. "Nosotros no pretendemos eso, pero sí 40 o 50 pesos. Por tal motivo, realizarán el jueves una protesta: "vamos a manifestarnos públicamente con corte de rutas por los precios viles que se están pagando los industriales", adelantó Gracés.
Fuente: Infobae