Síntomas, tratamientos y control de la enfermedad reumática en la infancia 

Pediatría - No tiene cura pero los avances médicos permiten tener una vida normal con los tratamientos. Especialistas realizaron una encuesta para conocer cómo se abordaron estas patologías durante la cuarentena.

No es sólo cosa de grandes. Los niños y los adolescentes pueden desarrollar enfermedades reumáticas y necesitar una rápida intervención de los especialistas para impedir que los síntomas avancen y sean incapacitantes. Si bien las condiciones del aislamiento pudieron amenazar la continuidad de los tratamientos, una encuesta revela que la gran mayoría de los pacientes continuó con las consultas de modo virtual.

Si bien las enfermedades reumáticas crónicas no tienen cura, Rubén Cuttica, médico reumatólogo pediatra y consultor de la Sección Reumatología del Hospital "Pedro de Elizalde" de la ciudad de Buenos Aires, señaló que "los tratamientos han avanzado mucho en los últimos 30 años y los medicamentos llamados modificadores de la enfermedad sin duda han cambiado la calidad de vida de estos niños y de sus familias".

"Es muy importante no interrumpir los tratamientos porque la enfermedad puede recidivar y al continuar la actividad inflamatoria, puede producirse daño evolutivo. El abandono de la terapia física, por ejemplo, genera pérdida de fuerza y masa muscular", especificó Cuttica.

En ese sentido, destacó la relevancia de una atención interdisciplinaria para abordar los diferentes aspectos de estas enfermedades y advirtió sobre la necesidad de la pronta consulta ante los primeros síntomas: dolor, hinchazón, enrojecimiento y rigidez de las articulaciones, fiebre alta de curso prolongado acompañada de erupciones en la piel, aumento de tamaño de los ganglios, cansancio, falta de apetito y pérdida de peso.

¿Qué pasó durante la cuarentena?

La Fundación de Reumatología Infanto Juvenil de Argentina (FRIJ) presentó datos positivos respecto a la situación de los niños y jóvenes con enfermedades reumáticas durante la cuarentena. El 76% de los encuestados indicó tener controles médicos y consultas programadas durante la cuarentena, y el 63% de éstos pudo llevarlas a cabo. El 80% continuó sus consultas de manera virtual y el 71% manifestó haber tenido una muy buena experiencia con dicha modalidad.

"Las enfermedades reumáticas crónicas deben ser controladas con frecuencia para ver su evolución y actuar con rapidez ante los cambios, sobre todo si no hay mejoría o se produce un empeoramiento. En tal sentido, nos propusimos realizar una encuesta para saber cómo estaban nuestros pacientes y cómo los habían afectado la pandemia y la cuarentena", explicó por su parte María Judith Iglesias, terapista física, y consultora del servicio de Kinesiología del Hospital "Pedro de Elizalde".

Del trabajo participaron 143 niños y jóvenes de todo el país. El 77% de ellos manifestó tener artritis idiopática juvenil (AIJ), el tipo más frecuente de artritis en los niños menores de 16 años. "La AIJ afecta a 1 de cada 1.000 niños, incluso durante la primera infancia", aseguró Cuttica.

"La implementación de la telemedicina ha dado excelentes resultados. Es una modalidad que va a continuar, aunque sin prescindir de los controles presenciales necesarios. Para los pacientes del interior ha sido de gran beneficio dada la limitación en los traslados", destacó el médico.

"Hemos aprendido incluso a sostener el tratamiento kinésico de este modo. Creemos que, más allá del contexto actual, esta modalidad se ha convertido en una ventaja enorme para los pacientes que viven a distancia y que muchas veces no pueden o no tienen los recursos para trasladarse y/o alojarse", amplió Iglesias.

El acceso a los medicamentos

Respecto del acceso a los medicamentos, el 78% de los pacientes indicó recibirlos periódicamente desde el inicio de la cuarentena, sin embargo, el porcentaje restante manifestó no recibirla por falta de provisión por parte de las prepagas, obra social o Ministerio de Salud (66,67%); o por no poder circular para retirarlos en la farmacia (33,33%).

"Garantizar la provisión de medicamentos requirió un intenso trabajo de comunicación mediante notas a las entidades correspondientes explicando la necesidad de los mismos", puntualizó Cuttica.

"Cabe destacar que ya prepandemia algunos pacientes referían dificultades para obtener la medicación", enfatizó Iglesias.

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