Agus Montero, es profe de Educación física y de Yoga. Su incentivo es ayudar a las personas. Da Yoga terapeútico en el Club Mariano Moreno.
Proveniente de la ciudad de Henderson, Agus Montero llegó a Olavarría para estudiar el Profesorado en Educación Física. Finalizada su formación decidió quedarse a vivir en nuestra ciudad, es ahí cuando comienza su camino con el yoga. Agus nos cuenta como se vinculó con el mundo del yoga: "Después de la pandemia empecé a estudiar Yoga, comencé con una profe de Buenos Aires, que es una chica famosa, Naty Franzoni, es del ámbito del Yoga, es modelo y conductora. Como yo quería seguir estudiando, necesitaba encontrar algún método que la profesora que tuve no me ofrecía, por lo que tenía que encontrar alguna escuela que trabaje más lo que yo necesitaba, que eran los cuerpos de la pospandemia. Y encontré a la Escuela Internacional de Yoga, que está conectada con la India, escuela en la que me sigo formando, porque en esta escuela empecé nuevamente el primer grado, porque por más que ya tengas conocimiento, tenés que empezar de cero. Porque en el Yoga depende mucho en que escuela te formaste, ya que si no está registrada por la por la firma Argentina y la India no tiene validez para el Yoga a nivel nacional e internacional. Entonces, esta escuela yo vi que tenía esa validez, por lo que si yo me fuera a otro país, podría también tener ese prestigio de la escuela y seguir formándome sin ningún problema. En la Escuela Internacional de Yoga comencé mi formación con el grado de instructor, después me formé en grado de profesor y Yoga deportivo, porque a mí me gusta mucho lo deportivo y ahora estoy cursando el grado maestra de Yoga".
Fiel a su objetivo de dar clase a mucha gente, Agus continúa su relato: "después de lo vivido en pandemia, como nos afectó a nivel emocional. Diseñé mi proyecto y comencé a presentarlo en los distintos clubes. Mi idea era tener un lugar donde pueda ir mucha gente, en lugar de algo privado y caro. El club Mariano Moreno enseguida me abrió sus puertas y comencé mis clases, al principio fue difícil, porque tenía dos o tres alumnos, que a veces iban y a veces no, fue frustrante. Pero, eso también me enseñó a saber esperar, y que la gente me conozca, porque al ser de Henderson, no me conocían tanto. Y así fue que empecé con tres alumnos, después cinco, diez, hasta ahora que tengo casi sesenta alumnos distribuidos entre Yoga Terapéutico y Yoga Integrado. Estoy muy contenta porque es muy lindo el espacio que hay en el club y a la gente le gusta, en invierno tenemos la calefacción, en el verano los aires acondicionados, hay mucha comodidad en el salón, y eso hace que la gente también se quede, porque se siente cómoda".
Cuando le preguntamos a Agus el por qué del nombre de su estudio, nos respondió que "el Unalome es un símbolo que representa los diferentes estados que pasan las personas a lo largo de su vida. Simboliza que nuestra vida no es lineal, sino que vamos pasando por diferentes etapas desde que nacemos hasta morir. Cuando creé la página, tenía que tener un significado, y el color violeta, además de ser mi favorito para el yoga es el color de la calma, por eso uso el violeta en mi cuenta".
Yoga Terapeútico, centrado en la salud
"El yoga terapéutico", nos explica Agus, "viene del Ayurveda, la medicina de la India y busca por medio de técnicas y herramientas de la práctica de Yoga, la relajación o el samadhi, más conocido en la práctica, que es la relajación final. A diferencia de otras prácticas, los movimientos son más estáticos, más lentos, más conscientes y las posturas que trabajamos son en base a la columna vertebral. En donde trabajamos mucho la apertura del pecho, si hay personas, que necesitan trabajar el cierre, trabajamos postura de cierre. El beneficio es que al trabajar la columna, para el yoga la columna es todo, es el tronco de la vida, poder por medio del físico lograr un beneficio a nivel de la mente y poder relajarnos. Cuando una persona empieza yoga es muy común que tenga dolor de espalda, en los hombros, en el cuello, por la postura que tenemos hoy en día, y sobre todo a nivel emocional, porque justamente, la postura tiene un significado. Cuando estamos tristes, tendemos a cerrar. Cuando tenemos una autoestima baja, pasa mucho en los adolescentes, también los hombros hacia adelante, cuando nos da vergüenza algo, nuestra postura nos muestra de una forma ante el otro. Es como cuando vienen a la clase de Yoga y te dicen que están re bien, los mirás y están totalmente cerrados. Entonces hay una incongruencia ante lo que dice la persona y lo que muestra, se ve mucho hoy en día, y es importante que el ojo del profesor distinga esa situación para poder trabajar sobre eso. En Yoga buscamos ser conscientes de eso, de cómo están los hombros, de cómo está la espalda, los hombros que son las zonas de carga, ser consciente de cada parte del cuerpo para lograr un beneficio. A mí me encanta y lo trasmito así. Si bien todas las personas pueden hacer Yoga, hay ciertas patologías como la hipertensión en la que hay que tener mayor cuidado, ya que ciertas respiraciones o las posturas invertidas suben la presión, por lo que el profesor tiene que ajustar para esa persona, la clase".
Agus nos explica que "en todos los métodos la idea es trabajar por medio de la parte más densa, que es la que más se contractura, moverla y lograr calmarse. Es como cuando las personas que tienen ansiedad a veces uno cree que le tiene que dar cosas suaves. No, todo lo contrario, hay que mover el físico, hay que hacer cosas con mucha actividad, dinámicas para que la persona baje. Y el Yoga Terapia justamente busca trabajar con esa clase de personas que tienen ansiedad, ataques de pánico, porque las técnicas que trabajamos se centran en la salud de la persona y son distintas al Yoga Integrado. En el Yoga Integrado hay otros métodos y estilos, hay métodos más fuertes, como Yoga Deportivo, Yoga Flow, Yoga Kundalini. La idea es que en Yoga Integrado vayan trabajando y pasando por distintos métodos. En mi formación vi todos los métodos y estilos, eso es esencial para aprender las diferencias entre ellos y poder transmitir a la gente esas diferencias".
Yoga Deportivo, el deporte espiritual
Le pedimos a Agus que nos explique brevemente que es el Yoga Deportivo y nos dice que "el Yoga Deportivo no es muy conocido, es un deporte, un deporte espiritual le decimos nosotros. Se compite, hay jurados, acá en Olavarría no es muy conocido, yo no lo hago para competir, porque nadie se anima todavía. El Yoga Deportivo busca por medio de las posturas de fuerza, de equilibrio, de flexibilidad, trabajar justamente esa valencia. Por ejemplo, en una clase hacemos postura de fuerza, en otra hacemos postura de flexibilidad y elongación, estas posturas se entrenan fuerte, es un estilo fuerte. La gente lo siente más porque tienen que sostener la postura por más tiempo, porque ya sabemos que para mejorar la fuerza tenemos que sostener determinado tiempo, para mejorar la flexibilidad lo mismo. No se mejora de un día para el otro, sino que hay que trabajar y trabajar sobre la postura. Y a su vez generar un beneficio a nivel de la mente, por ejemplo, en las posturas de equilibrio se busca trabajar el equilibrio físico y a su vez el equilibrio mental. La flexibilidad es lo mismo, trabajo con flexibilidad en el físico para ser más flexible a la hora de tomar decisiones, para no estar tan rígido".
Percibir el interior para poder ver el exterior
"El beneficio más rápido y directo de la práctica", continúa Agus, "es la conciencia corporal en las personas, por ejemplo, que en una postura, apoyando las manos en el suelo, te des cuenta si un hombro hace más fuerzas que el otro, que puedas ir registrando esas cosas, y darte cuenta que hay días que tus hombros están más tensionados y otros que están más relajados y de acuerdo a eso ir trabajándolo. Lo ideal es trabajar en las clases con los ojos cerrados, porque la vista es el sentido que más estimulado tenemos hoy, actualmente todo pasa por el afuera y poco por el interior y el Yoga busca que vos primero sientas tu interior y luego percibas el exterior".
"Lo que nos enseña el Yoga principalmente, es a sentarnos a relajarnos primero, a tratar de relajarnos para luego llegar al estado de meditación, porque justamente la meditación es el estado de no pensamiento. Si yo digo que me pongo a meditar, estoy apegándome a un resultado que todavía no pasó. Tiene más resultado una buena técnica de concentración, de relajación, y no la meditación, porque en el momento que vos te diste cuenta que estás meditando, ya no estás meditando más. Es difícil de explicarlo. Es más fácil hacerlo propio, en la práctica", afirma Agus.
Les dejamos el Instagram de Agus, @unalome_yoga_olavarria para quienes deseen contactarse con ella.