Sergio en la Unidad 27 y Gustavo y Carlos en la Unidad 2, ambas del Servicio Penitenciario Bonaerense, graduaron como técnicos superiores.
Tres estudiantes privados de la libertad de dos cárceles bonaerenses de Sierra Chica se recibieron como técnicos superiores en Trabajador Social y en Administración con orientación en Marketing.
Se trata de tres internos de las Unidades 2 y 27 del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), quienes cursaron las carreras brindadas por el Instituto Superior de Formación Técnica (ISFT) N° 130.
Desde el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, a cargo de Julio Alak, destacaron el logro personal de Sergio, Gustavo y Carlos, ya que la educación es uno de los ejes de gestión que tiene como finalidad reducir los índices de reincidencia en el delito.
Sergio y Gustavo obtuvieron el título de técnico superior en Trabajo Social y Carlos en Administración con orientación en Marketing. Cabe destacar que el primero se encuentra alojado en la Unidad 27 y los otros dos en la Unidad 2.
Los flamantes trabajadores sociales podrán posicionarse en el mercado laboral de otra manera. Es que se encuentran capacitados para intervenir en diferentes espacios gubernamentales y no gubernamentales, para abordar problemáticas sociales implementando alternativas de resolución instrumentando metodologías de la investigación, elaborando diagnósticos y planificaciones; asesorando, gestionando y coordinando acciones y recursos a través de la sistematización de su práctica profesional.
Sergio proyecta ahora un futuro diferente con Valeria, su esposa con quien se conoce y comparten la vida desde los 16 años. "En el transcurso de mi detención, por mí y por mi familia, por mi señora que es la que me acompaña, traté de cambiar todos los malos hábitos que me trajeron hasta a este lugar. Dejé los vicios, volví con Valeria, me casé, ahora me recibí y tengo un montón de proyectos a futuro. Nuestro objetivo es formar una familia, eso nos quedó pendiente".
Carlos sostuvo que: "el cambio lo tiene que hacer uno mismo, pero es fundamental el apoyo de los seres queridos. Yo sé que se puede si uno es perseverante, le pone ganas y actitud".
"Estoy muy contento de haberme recibido y siempre animo a mis pares para que estudien", explicó por su lado, Gustavo.
"Acá (por la cárcel), tuve el tiempo para dedicarme de lleno al estudio para estar con la mente libre. Como les digo a mis compañeros, el cuerpo puede estar encerrado, pero nunca tuve la mente presa, siempre me enfoqué en cambiar para salir diferente. En este camino tuve ayuda, por ello les quiero agradecer a dos profesores que fueron pilares para mí, se nota que son docentes de vocación, Pablo Palazzolo y Patricia Prada, siempre les dije que además de ser buenos profesores, son excelentes personas, comprometidas con la educación", sostuvo Sergio.
El Instituto Superior de Formación Técnica N° 130 en contexto de encierro ofrece tres carreras para que los internos puedan lograr una formación técnica y profesional, las cuales les permitirán adquirir habilidades laborales e intelectuales que serán clave a la hora de competir en el mercado laboral. Se trata de las Tecnicaturas Superiores en Trabajo Social y Marketing y Desarrollo de Software, un total de 51 internos en Sierra Chica se encuentran cursando en esta institución.
El plan de estudios del ISFT Nº 130 apunta a consolidar en cada alumno una cultura emprendedora, trabajando la idea de vincularse con el desarrollo local.
En el acto de graduación de Gustavo y Carlos en la Unidad 2 estuvieron presentes el director del Instituto, Sebastián Ostertag, docentes y alumnos junto al personal penitenciario del área de educación.
La ceremonia protocolar estuvo a cargo de la profesora Luciana Fusco y se desarrolló en el SUM intramuros de la Unidad Penal.
Luego de la entrada de las banderas de ceremonias y la entonación del Himno Nacional, la docente Claudia Gaite despidió cálidamente a los nuevos técnicos destacando que "la vida puede tener momentos buenos y momentos malos, sin duda, uno de los más complicados es decir adiós. Despedirse no siempre es fácil, pero por suerte, en algunos casos, despedirse de alguien o de algo es una gran oportunidad para crecer y volverse a encontrar con uno mismo".
Cabe destacar que la Universidad Nacional del Centro (UNICEN) también desarrolla actividades académicas en las cárceles de Sierra Chica y Azul con la oferta de las carreras de Abogacía y Comunicación Social.
En total 225 privados de libertad participan de la oferta académica total de la UNICEN. Y en toda la órbita del Servicio Penitenciario Bonaerense participan de las actividades educativas de Nivel Superior en contexto de encierro un total de 2.250 estudiantes.