La profesora de educación física Alejandra Crimaldi explica en esta nota los beneficios que brinda la incorporación de los columpios como actividad física, en donde se comienza de manera lúdica, aún cuando se trabaja con adultos. "Ejercitar con columpios tonifica todo el cuerpo, mejora la alineación postural, descomprime la columna", señala Alejandra.
Alejandra Crimaldi, profesora de educación física dedicada a la docencia en Jardines de infantes, en CEF y dueña desde hace 28 años del gimnasio Piuquén, nos explica de qué se trata ejercitarse con columpios y cuáles son sus beneficios: "En columpios, me formé inicialmente con Patricia de Oar y con mis conocimientos de yoga adultos e infantil, pilates, gimnasia y educación física, comencé con esta propuesta para niños y adultos que llamé Vuelo Intimo".
"La idea es ofrecer propuestas activas principalmente a las mujeres, por eso este año seguimos con la propuesta de columpios, más todo lo que es cardio combinado con técnicas que trabajan la parte muscular, por eso es cardio mix, pilates, con elementos, yoga integral, después ofrecemos para las nenas también fitness infantil que incluye todo lo que es baile, yoga y educación física infantil", comienza diciendo Alejandra.
Alejandra continúa: "es un método donde se combinan técnicas de yoga, de pilates, gimnasia, acrobacia, stretching. Haciendo posturas y ejercicios sobre el columpio en total suspensión o con algunos apoyos, por ejemplo, brazos o piernas apoyados en el columpio y otra parte del cuerpo en el suelo. Es una propuesta súper divertida que atrae tanto a los nenes como a las adultas y que tiene un montón de beneficios. Ejercitar con columpios tonifica todo el cuerpo, mejora la alineación postural, descomprime la columna".
"Se trabaja sobre principios como el control, la fluidez, la concentración, la respiración, la centralización, estos principios también lo son del pilates. Sobre todo trabaja mucho todo lo que es la parte central del cuerpo, abdomen, glúteos. De ahí, la fuerza va para el resto del cuerpo, centralizás bien en esa zona para controlar las posturas. Además, al trabajar sobre tela, que es flexible, a veces se logran hacer posturas y posiciones que en el suelo suelen ser mucho más complicadas, y eso te genera confianza, baja el nivel de estrés, te relaja y favorece la circulación", dice Alejandra.
Alejandra nos cuenta que "te vuelve un poco a la niñez, las adultas lo primero que hacen es subirse y hamacarse y se súper divierten. Además, podés trabajar uniendo posturas y se hace una clase súper dinámica, divertida. Entonces están trabajando posiciones, posturas o ejercicios que se realizan en otra actividad, en otras propuestas. Lo que tiene el columpio es que le da un desafío extra al ejercicio. A veces ayuda a lograr ciertas posturas que en el suelo tal vez son difíciles, pero en otras las complejiza, te las hace más desafiantes".
No todas las personas son iguales y cada uno a la vez que va conociendo su cuerpo, va interactuando con el columpio. En este sentido Alejandra dice que "otro factor a tener en cuenta cuando ejercitamos con columpios es el movimiento, que le genera algo más de dificultad al ejercicio, hay gente que llega y se da cuenta que se marea o tiene vértigo y hasta ese momento no lo había notado. Siempre se trabaja paso a paso, metodológicamente y adaptándote a la persona, no es que todas en la clase hacen el mismo ejercicio, se les va adaptando y con el tiempo logran hacer todos los ejercicios, de a poco, clase a clase".
Empezar una nueva actividad puede ser intimidante, en relación a los comienzos en los columpios. Alejandra nos dice que "generalmente cuando empezás con los adultos, hago lo mismo que con los niños. La idea es que sepa desde dónde se puede utilizar el columpio, la técnica para pararse, para sentarse, para acostarse posición ventral, dorsal, cómo tomar la tela y ubicar el cuerpo en la tela para evitar un mal momento. Es raro que se caigan, pero puede suceder si no tienen en cuenta cómo sostenerse, cómo sentarse, cómo apoyarse. Por ejemplo, para sentarte tenés que calzar bien la tela. Tomar la tela, abrirla bien, calzarla en glúteo, para acostarte estirarla bien, apoyar la rodilla primero y estirar. Cuando te vas a parar, tomarte bien de la tela y apoyar bien el pie. Las hago pasar por todas las posiciones, que experimenten las distintas posiciones. Siempre inician con posturas simples, y más que nada para que tome conciencia de qué sensación le produce el sentarse, acostarse o pararse en el columpio y después cómo se siente con el movimiento".
"Hay muchas personas que hacen las posturas sobre el columpio con el menor movimiento posible y a otras les encanta que se mueva bastante y darle velocidad al columpio cuando está haciendo la postura. Eso se va viendo a medida que la persona va haciendo las distintas posturas en la clase y respetando los tiempos de cada uno, sea niño o adulto, porque una mala experiencia es difícil revertirla, entonces para perder el miedo hay que ir probando", observa Alejandra.
Alejandra nos cuenta que cuando se trabaja con los niños, lo hace de manera lúdica, expresando que "se trabaja todo a través del juego. Toda la clase es jugada, la primera parte se inicia a través de un juego con distintos elementos, pelota chiquita, pelotas grandes, pelota de pelotero, muñecos, globos o hacemos circuitos con otros elementos. Así vas trabajando distintas capacidades necesarias para después lograr en el columpio trabajos de fuerza, flexibilidad. Ya en los columpios juegan con la compañera, es bien dinámica la clase, trabajo mucho con tarjetas de posturas, entonces ellos van llevando del suelo la postura al columpio. A su vez crean secuencias de esas posturas. Trabajan de forma individual y en otras oportunidades de forma grupal, creando, poniéndose de acuerdo. El juego y la creatividad siempre están presentes", afirma Alejandra.
Ya cerrando la entrevista, Alejandra resume que "beneficios para el cuerpo, todos, porque estás trabajando todos los músculos. Se trabaja abdomen, glúteos, piernas, brazos; es súper completo porque aplicás dentro del columpio técnicas de yoga, de pilates, de gimnasia, de acrobacia".
"El columpio es el elemento, la herramienta que utilizás para la clase. Por ejemplo, al hacer la plancha en el columpio, no estoy cambiando la técnica, que es la misma que en funcional o pilates, la variante está en el desafío de sostener la plancha con los pies en el columpio. En síntesis el columpio es un ejercicio sano, completo y divertido que te pondrá a tono y hará trabajar todo tu cuerpo", sostiene Alejandra Crimaldi.