La disputa entre las empresas y el Sindicato Unico de Trabajadores del Neumático Argentino (Sutna) tiene ya su impacto en los 'stocks de protección' que manejan los distintos sectores. Ante la escasez de las marcas tradicionales, las gomas chinas asoman como sustitutas.
Este laberinto en el que ha ingresado la disputa salarial entre las firmas que producen neumáticos en la Argentina y el Sindicato Unico de Trabajadores del Neumático Argentino (Sutna) transitó un día más sin encontrar una salida y la onda expansiva ya afecta a distintos rubros de la economía.
El estado de situación dice que la producción está completamente suspendida, ya que las tres fábricas de neumáticos que operan en el país tienen las actividades anuladas por esta controversia.
Como uno de los coletazos, la automotriz nipona Toyota informó ayer que paralizará desde este miércoles su planta de Zárate. Otras terminales, como Renault, Fiat, Volkswagen y Peugeot, evaluaban anoche medidas similares ante la extensión del conflicto sindical, que ya lleva cinco meses.
En el mismo sentido, el pedido de "sensatez" formulado por el gobierno nacional no tuvo eco, y ante la escalada la administración que encabeza Alberto Fernández advirtió ayer por la tarde que podría liberar la importación de estos insumos.
Mientras tanto, lo efectos irremediablemente se empiezan a sentir en Olavarría, tanto en el transporte público como privado de personas, y el transporte de mercancías.
Juan Moraguez, socio gerente y tercera generación familiar de Transporte Traveller, hizo una detallada exposición de la forma en que está impactando en la actividad.
La empresa nació a comienzo de los años '70, fundada por su abuelo en Sierra Chica para brindar servicio en el movimiento de piedra; sintió el shock del estallido social de 2001, pero a los pocos años retomó el impulso hasta convertirse en una de las principales referencias de la región.
Moraguez ofreció su versión de esta "crisis del neumático". "Hasta el momento nosotros contábamos con lo que se llama 'stock de protección' de neumáticos en función de la cantidad de unidades que tenemos en circulación, pero a medida que vamos realizando la rotación nos estamos dando cuenta de que, con la falta de disponibilidad, ese stock está llegando a una situación crítica" reveló el empresario transportista.
No quedaron consultas a proveedores por hacer, pero "Hemos llamado a todos los disponibles, de todas las marcas, y la situación es similar en todos los casos. No contamos hoy con una oferta para poder 're stockearnos' de neumáticos, y a corto plazo el panorama asoma como crítico" manifestó.
Moraguez confía en que ello no redunde en problemas para los servicios que la empresa presta tanto para el sector minero como el petrolífero.
"Aunque nos inquieta, porque si no disponemos de neumáticos no podemos trabajar. Y no sólo nuevos, sino que también afecta a todos los proveedores con los que realizamos la metodología de recapado o recurado" añadió.
Esta chance se da cuando un neumático está al borde de consumir su vida útil, pero con un casco en buenas condiciones, lo cual permite su reutilización a través de esta modalidad.
"Los proveedores ni siquiera disponen de bandas para este tipo de operación de 'recapado' o 'recurado', y eso implicará también inconvenientes para recurrir a esta alternativa" avizoró Moraguez.
Las perspectivas de la firma están centradas en las medidas que adoptarán los grandes jugadores del mercado: Bridgestone, Pirelli y Fate. "Necesitamos saber cómo nos podemos ir organizando para poder atravesar esta situación" reclamó.
Ante la crisis la variante china parece querer ganarse algunos nichos, aunque en el caso de Transporte Traveller prevalece la apuesta a lo tradicional.
"Nosotros, como empresa, tratamos de no adquirir neumáticos de esa procedencia, sin desmerecer el producto. Por experiencia propia sabemos que no tienen la vida útil que las marcas más conocidas de procedencia brasileña o nacionales" comparó.
La relación precio (menor en el caso de los neumáticos orientales) / vida útil tampoco es tan significativa, dijo Moraguez. "Este tipo de neumáticos en la mayoría de los casos no son aptos para un recapado o un recurado. De ser necesario salvar esta situación recurriríamos a ellos, pero intentaríamos evitarlo hasta última instancia por los resultados que hemos corroborado en nuestras unidades" añadió.
Agotadas las consultas en Olavarría y en la zona, minutos antes de la charla con este medio un proveedor radicado en Mar del Plata pidió a la firma radicada en Loma Negra la confirmación de si estaba interesada en neumáticos chinos.
Un flete completo salió de aquella ciudad atlántica en horas de la tarde hacia Olavarría. "Ese debate se trató en la mesa chica de la empresa y siempre es una opción adquirirlos para poder seguir trabajando. Hoy nuestro objetivo principal es ese, y que las unidades no se detengan por este cuello de botella que tenemos con los neumáticos" indicó.
El ruido de este conflicto se hace sentir en el momento menos oportuno.
"Gracias a Dios nuestros clientes de la industria cementera o petrolera están en un gran momento y nosotros debemos estar a la altura, por eso no podemos bajar nuestra fuerza de servicio. Queremos seguir siendo ciento por ciento operativos" enfatizó Juan Moraguez.
Un rumor extraño en la provisión de neumáticos venía percibiendo el joven empresario antes de esta puja entre el sector empresarial y el laboral. "Estábamos teniendo inconvenientes con las importaciones, las restricciones, y eso iba generando también inconvenientes en el 'stock de protección', lo que nos obligaba a apelar a distintos proveedores para sostener las existencias en nuestro rango histórico" recordó.
"Ahora esto explotó y las empresas han decidido paralizar. No tienen insumos para producir, existen trabas gremiales y nosotros en el medio estamos tratando de atacar todos los frentes como sea posible" consignó Juan Moraguez.
El transporte público de pasajeros también es un demandante de neumáticos a gran escala y acerca de la coyuntura se pronunció Marcelo Da Silva, titular de la firma del servicio interurbano "Las Sierras de Olavarría".
"Está muy difícil conseguir las gomas nacionales y mucho menos cuando uno necesita comprar para recapar. En este momento estamos bien, porque la mayoría de los coches son nuevos, y con las gomas nuevas, pero uno tiene que ir previendo y haciendo stock, lo que hoy es imposible" analizó.
"El problema es con las gomas nacionales. Hay neumáticos que son de marcas chinas, pero no es lo que uno pretende porque son gomas livianas, más angostas, tienen menos tela; son más bajitas, algunas son muy sintéticas y después no sirven para recapar" detalló.
Los trabajos de recapado (sólo recomendables para el tránsito ciudadano) se hacen en Olavarría, Coronel Pringles, la zona del AMBA.
"Los problemas con las bandas de recapado probablemente sean similares" estimó. Da Silva comentó que "en nuestro caso un neumático delantero tiene una vida útil de unos 120 mil kilómetros andando en la Ciudad y las de atrás un poco más, mientras los que andan en la ruta sí tienen una mayor durabilidad".
"Las gomas chinas tienen un menor costo, alrededor de un 30%, pero esa diferencia se paga en el rendimiento. En el caso de una goma delantera, la de origen chino andan en los 70/80 mil kilómetros de vida útil" verificó.
En el corto plazo, si bien los inconvenientes en el suministro están, Da Silva no espera alteraciones en el servicio de transporte de pasajeros interurbano.
"Balito" Ortiz tiene una larga experiencia en el transporte privado de personas y presta servicio tanto al ciudadano común como a funcionarios de las grandes empresas cementeras.
A un costado de la ruta, Ortiz pintó ayer un panorama "un poquito complicado para conseguir neumáticos por este problema que existe en las grandes plantas de Buenos Aires". A tono con las palabras de Moraguez, expresó que "lamentablemente esto nos sucede en el momento que más necesitamos".
"Todos estamos llamando a los distintos proveedores, porque se va complicando el panorama" subrayó Ortiz, en función de los altos niveles de actividad económica que registran distintos sectores, sobre todo el cementero. "Hay rubros que andan mucho" certificó y expuso que "nosotros, que estamos permanentemente en la ruta, lo vemos siempre".
"Los transportes están a full y uno que trabaja con las cementeras más importantes de la Argentina lo constata cuando pasa por las playas y están todas llenas de camiones. Y esos neumáticos tienen mucho desgaste, como los de nuestros vehículos" sumó.
Un juego de neumáticos, en el caso de un servicio como el de Ortiz, sobrevive a unos 40/50 mil kilómetros. "Más de eso no, y según qué marcas. Yo últimamente no pude conseguir la marca que buscaba, unas Bridgestone, y la tuve que reemplazar por una alternativa de origen chino" citó.