LAPRIDA

Michetti: "El mal momento social que vive la Argentina es lo que debemos desentrañar"

La diputada nacional macrista estuvo en Laprida y habló con EL POPULAR Dijo que volver a sus pagos es "una sensación muy fuerte". Analizó la interna partidaria, la campaña presidencial y el inicio del camino del Pro en Laprida. También relativizó la caída de su perfil.

Para la actual diputada nacional y ex vicejefa de Gobierno porteño, Gabriela Michetti, Laprida es su contacto emocional. Venir a sus pagos, siempre es "muy fuerte" -dijo- y por eso que cualquier retraso en su arribo, como ocurrió ayer por la tarde -apenas media hora- queda de lado cuando desde el auto desciende junto con ella su sonrisa de siempre. Esa calidez para sus amigos que mantiene y "las luces del centro" que no la encandilaron. Recibió a EL POPULAR así como a otros medios locales, manifestando sus quejas por el mal estado de la ruta 51 y en poco más de 20 minutos a buen ritmo, fiel a su estilo de siempre, habló de los temas que la rozan en la interna partidaria, la campaña presidencial y del inicio del camino del Pro en Laprida.

La Fundación Pensar que forma parte del equipo de pensamiento del Pro que encabeza Mauricio Macri estuvo ayer en Laprida. Con ellos lo hizo además de Michetti, Miguel Braun -fundador del Cippec que desde la Fundación está al frente de la elaboración del programa de gobierno de Macri- ofreció una disertación sobre "El sector agropecuario como motor del crecimiento y desarrollo del país". Lo hizo en reemplazo del ex presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luciano Miguens, como se había anunciado en un principio.

Sostuvo que la cuestión agrícola ganadera es el motor del despegue económico y de las variables macro, que todo el mundo coincide que son buenas. En este aspecto analizó que todo el potencial y las oportunidades que el sector tiene para crecer -caso la ganadería- "son mucho más grandes que las que se están aprovechando hoy".

"Así y todo sigue existiendo mucha traba desde la política pública para el empuje y optimización de un sector que ha sido el que más se ha tecnologizado y modernizado en la Argentina, que necesita mucho apoyo desde el Estado", agregó.

Relativizó la caída de su perfil y lo atribuyó a la diferencia de estar al frente de un Ejecutivo con estar en la Legislatura.

-¿Cómo es su relación hoy con Rodríguez Larreta, jefe de Gabinete porteño, a la vista de la feroz interna que atraviesa el Pro?

-La relación personal con Horacio siempre ha sido buena en el mano a mano y día a día, en compartir en su momento una gestión y hoy "la mesa chica" de las decisiones del Pro. Pero hay una realidad de competencia por una posible candidatura y no es tiempo creo de definirlo, pero se da en el marco de una buena relación personal. No hay en nuestro equipo tensiones de que no nos hablemos o discutamos mal.

-¿Está dispuesta a ir a una interna dentro del Pro para ser candidata a Jefe de Gobierno?

-Siempre soy partidaria de que la mayor transparencia y la mayor posibilidad de darles a las candidaturas una representación del voto de la gente, eso es lo mejor que nos puede pasar. El problema que tenemos como Pro que, al ser un partido chico, tiene la posibilidad de dar sus candidaturas por consenso -como condición nuestra-, y por otro lado un problema que se nos puede presentar es que la interna en Buenos Aires no será abierta, entonces al no ser obligatoria la gente que vota es la gente del "aparato" político. Entonces nos puede pasar como Pro que los militantes políticos voten en nuestra interna al candidato que tiene menor intención de voto y para el Pro sería un problema grave.

-Usted imaginaba hace poco como despiadada y complicada la carrera de la campaña presidencial. Con la muerte de Kirchner, da la sensación que se la vuelto mucho más "humana". ¿Lo percibe así?

-En principio, con los primeros gestos que la Presidenta ha dado en estos días, me parece que nos podría llevar a pensar en una lógica mucho más dialoguista y eso sería un capital enorme que la Presidenta le podría dar al país hoy. Tuve una charla con ella después de las elecciones legislativas del 2009 y hablamos mano a mano mucho de ese tema, de la necesidad de que los sectores empresariales con los trabajadores se entreguen y dialoguen, que los partidos políticos dialoguen. Ella puede llegar a estar convencida -ojalá- de esa situación y nos puede dar otro clima. Tampoco me quiero adelantar porque el kirchnerismo tiene tantas divisiones y sectores que son absolutamente provocativos y confrontativos que no se quién va ganar en esa lógica y en definitiva si la Presidenta seguirá con estos gestos. Pero si fuera desde el diálogo sería maravilloso porque la carrera presidencial y la campaña, como usted dice, estaría dada con una lógica un poco más sensata y razonable y que es lo que los ciudadanos piden.

-¿Qué sensación térmica percibe recorriendo los pueblos y el país?

-Si uno a la gente le pregunta si está mejor que hace unos años dice que sí, pero si le pregunta si está satisfecho y contento, nadie dice que se siente bien. Como que gran parte de la población en la Argentina tiene la sensación de que no estamos en un buen momento social y eso es lo que hay que desentrañar. No basta que el país tenga variables en buen estado, la verdad es que hacen falta otras cosas para que la sociedad esté bien. Hace falta una lógica de mayor diálogo, de pacificación y no un enfrentamiento como si fueran unos la Patria y los otros antipatrias. Esas cosas han dado que no hay mucha felicidad en el pueblo y, si le sumamos la realidad del 35% como mínimo de argentinos bajo la línea de pobreza, no nos puede hacer felices y estar bien.

-Usted venía con un perfil muy alto y de golpe ese perfil decayó. ¿Lo siente así? ¿Qué pasó?

-Hay un dato de la realidad que cuando uno está en la gestión de un ejecutivo el nivel de exposición es muy alto y los temas de la gestión son tapa de diarios dos veces por semana. En el Congreso donde hay una dispersión y una fragmentación enorme, es muy difícil llevar adelante los temas y el perfil naturalmente se baja. En mi relación con la prensa y mi exposición tengo un manejo natural. No hago prensa proactiva, no llamo ni mando cosas a los periodistas para que me publiquen algo. Estoy en los medios de acuerdo con la demanda de ellos de acuerdo con los temas que estoy trabajando.

-De 1983 al 2010, Laprida ha estado polarizada por el bipartidismo. ¿Por qué el Pro en Laprida y cuál es la proyección de cara a 2011?

-Hoy estamos trabajando desde lo técnico con los sectores, en este caso con el campo y levantar los requerimientos e inquietudes de la gente. La cosa política la vamos ampliando, haciendo con mucho cuidado porque no nos interesa venir a generar problemas, sino todo lo contrario: a tratar de representar intereses que sentimos que no están representados. Nos vamos a tomar el tema con mucha calma, pero con deseos e inquietud de generar en cada localidad a nuestro partido. No nos ponemos una meta, pero vamos muy seguros de que a la Argentina le hace falta una propuesta como la nuestra y dirigentes como tratamos de proponerle a la gente.

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