Luego del triunfo ante Corea del Sur El partido fue el comentario de la jornada. Grandes y chicos lo vivieron a su manera. En las escuelas se dispusieron televisores y pantallas para mirarlo. La Municipalidad permaneció con las puertas cerradas hasta que finalizó.
Los chicos en las escuelas pudieron disfrutar del triunfo por 4 a 1.
La Madrid se vistió de celeste y blanco para el mundial. Como en la gran mayorÃa del paÃs, creció la venta de electrodomésticos y de merchandising.
Literalmente, General La Madrid estaba desierta, ni gente, ni siquiera los perros andaban. Es que con el tempranero partido, sumado al frío y la humedad de la mañana los vecinos aprovecharon para estar un rato más en sus casas. Luego de las 10.30 el panorama fue cambiando y volvió el ritmo habitual, pero con el agregado de los colores celeste y blanco.
Los chicos en las escuelas tenían permiso para llegar quince minutos después de terminado el partido o directamente verlo en las mismas instituciones. Docentes consultadas comunicaron que no hubo una tendencia marcada a faltar.
En la EP Nº 1 el salón de actos se preparó para la jornada: pantalla gigante, luces apagadas, sillas ordenadas en filas y banderas hechas en papel lo decoraban. Los chicos también lucieron cuanto pudieron para seguir el cotejo; bandera, gorros, binchas y camisetas fueron el loock elegido.
Los nervios, desde el minuto 0, se aflojaron luego del cuarto tanto y terminaron con el pitazo final. Los últimos minutos fueron los más ruidosos y vividos con alegría. Luego de que el árbitro marcara la finalización se desató la alegría, el inconveniente fue volver al aula. Los comentarios (los grandes también se sumaron) siguieron largo rato y se referían a las jugadas o a los goles.
En otros establecimientos educativos de la ciudad el panorama fue similar; mucha cara pintada y camisetas de la selección dieron el marco a la mañana lamatritense. El frío y la vuelta al trabajo se hicieron más amenos con el 4 a 1.
Pero no sólo los chicos disfrutaron de los 90 minutos. En la Municipalidad, por ejemplo, la puerta principal permaneció cerrada hasta que los muchachos de Maradona dejaron el rectángulo verde. Los autos de las autoridades se estacionaron sobre la San Martín pocos tiempo después de la victoria concretada.
La gente responsable de la Dirección de Cultura se aprestaron a ver el partido en su lugar de trabajo. En la oficina calentita, mate, torta y la tele fueron los elementos elegidos para seguir el evento.
La argentinidad al palo: General La Madrid no escapó al fenómeno de la suba de ventas de caras al mundial. "La facilidad de las cuotas fueron determinantes", coincidieron responsables de las casas de venta de electrodomésticos.
Reconocieron que subió en un porcentaje, que aún no fue determinado, pero "muy alto", la venta de televisores, "principalmente los LCD", contaron. Inclusive se dio una anécdota un tanto curiosa: "una persona viajó desde una sucursal de Olavarría a buscar un televisor porque allí ya no se consiguen", aseveraron. Además indicaron que en el mercado ya escasean estos electrodomésticos.
Las vuvuzelas llegaron a La Madrid: Respecto de la venta de merchandising, comerciantes del rubro consultados, aseveraron que en los últimos días, "principalmente entre estos dos primeros partidos, se vendió mucho del stock, sobre todo banderas". También gorros, cornetas y pompones fueron los elementos elegidos para alentar al equipo albiceleste.
