BASQUETBOL. Le ganó a Quilmes de Mar del Plata 64 a 49 por la Liga Junior
Luis Ahumada
Estudiantes jugó ayer un muy buen primer tiempo, en el que prácticamente borró de la cancha a un equipo con muy buenos jugadores, y se llevó un inobjetable triunfo por 64 a 49 ante Quilmes de Mar del Plata en el Gran Gimnasio del Parque Carlos Guerrero por la séptima fecha, segunda de la segunda ronda, de la Zona Sur de la Liga Junior de básquetbol, en su Zona "A".
Así, el equipo de Agustín Bianchi se aseguró la clasificación a los playoffs de cuartos de final del certamen a falta de tres jornadas para concluir la serie regular, aunque buscará lograr el mejor récord posible de cara a obtener la ventaja de localía en la etapa decisiva de los playoffs.
El partido fue disputado solamente en los primeros minutos del primer cuarto. En el inicio las defensas superaron claramente a los ataques y el partido fue de muy pobre goleo. Pero un triple de Francio Mariani y otro de Emiliano Coppero hicieron disparar al local en el marcador y de allí en más el albinegro controló el juego casi a voluntad.
Con un buen juego de equipo, defendiendo duro y anotando puntos fáciles en transición, el Bata secó por completo al ataque cervecero, que se cansó de probar desde el perímetro toda la noche con muy poca puntería.
En el segundo cuarto el asunto cambió poco. El Bataraz puso un parcial de 21 a 9, nuevamente maniatando por completo al ataque marplatense, que pese a cambiar jugadores constantemente no pudo encontrar una vía clara de gol.
El base Emiliano Coppero (9 puntos) y el interno Facundo Barreto (8) fueron los abanderados del ataque bataraz en el segundo cuarto, muy bien complementados por Franco Giorgetti (que puso un par de tapas) y de una correcta tarea defensiva.
Con una ventaja de 41 a 17 en los primeros veinte minutos, los marplatenses regresaron al campo de juego tras el descanso largo con otra actitud tanto en ataque como en defensa, y eso sorprendió algo a los locales.
Los de la ciudad balnearia pusieron un parcial de 9 a 2 ante un Bata que se desordenó en ataque y se quedó sin gol (2 puntos de Coppero y 2 de Barreto en el tercer período), pero nuevamente en base a la defensa pudo aguantar el repunte cervecero, que ante una pésima noche desde el perímetro dio lucha en el juego interior con Nicolás Cocciolone (8).
Más allá de la buena actitud que mostraron los dirigidos por Luis Fernández para intentar revertir la historia, estuvieron bastante condicionados por las faltas y en el cuarto final el Bata volvió a poner las cosas en orden.
Agustín Bianchi puso doble base con Emiliano Coppero y Santiago Dilascio para asegurar el traslado ante la presión que propuso Quilmes. Así, los gallitos pudieron cerrar el juego sin mayores sobresaltos administrando la buena diferencia sacada en el primer tiempo ante un rival con muy buenos jugadores, pero que en lo colectivo fueron claramente superados por los albinegros.