AUTOMOVILISMO. El argentino habló de lo ocurrido con su frustrado ingreso a la F-1 con el USF1
Tras su fallida incorporación a la Fórmula Uno con el USF1 y luego de tomarse un prudencial silencio, el cordobés José María López habló de la gestión que no prosperó y en ese sentido señaló que "confía" en la gente y se abstuvo de evaluar si lo "estafaron o no".
"Yo confío en la gente y soy responsable de mis actos, pero no voy a opinar si nos estafaron o no", afirmó "Pechito" en una extensa conferencia de prensa que brindó ayer en el noveno piso del Automóvil Club Argentino.
Junto al piloto de Río Tercero estuvieron su padre, el periodista-empresario Felipe Mac Gough y Víctor Rosso, quienes formaron el grupo de apoyo a López en el frustrado intento de llevarlo a la máxima categoría del automovilismo mundial.
"Cada uno de nosotros confió en lo que estaba haciendo. Hay cosas que nos dijeron y que luego nos dimos cuenta que no eran así. Cuando llegué a Charlotte vi cosas, pero no era lo que nos habían dicho, igual siempre estuvo la confianza de nuestro lado", reiteró López.
Casi en un monólogo, el cordobés añadió: "Pido disculpas por tardar en hablar, pero comprendan que hay cosas que siguen dando vueltas. Hubo mucha gente que me apoyó y lo sigue haciendo. Se hablaron muchas cosas del grupo que no tienen nada que ver con la realidad".
"Hubo muchas cosas que no pensamos que iban a pasar, creo que hasta la FIA se cayó atrás de esto y el mismo (Bernie) Ecclestone, quien dijo que había dificultades, pero nunca que no iba a ser", expresó.
Consultado sobre si quedó en el debe alguna gestión, López respondió: "Se puede decir que se hizo todo lo humanamente posible. Yo vi como se fueron haciendo las cosas en Europa y en Estados Unidos".
"Pasábamos de estar abajo de todo, con el ánimo bajo tierra, y al rato renovar las esperanzas. Cada uno hizo lo suyo, pero nadie buscó un rédito personal, ni muchos menos económico. Venga bien o mal, la autocrítica se tiene que hacer", reflexionó.
Sobre qué pasará de ahora en más, "Pechito" dijo: "La idea es seguir, en no bajar los brazos. Todo el mundo sabe lo que nos pasó. Vamos a seguir adelante si bien hoy en día no tenemos ningún proyecto en firme".
"Claro que ya no es lo mismo, ya son varias caídas y no sé hasta cuando lo voy a aguantar, incluso mi familia. ¿Téster?, sería lo más fácil porque correr en F-1, como están dadas las cosas, es casi imposible por este año. En algún momento las decisiones las voy a tomar yo", subrayó.
López fundamentó sus dichos cuando señaló: "Se dice que hay muchos pilotos en la F-1 que no van a llegar a fin de año, por eso no sé hasta que punto esto es malo. Si hacemos algo, será con un proyecto a futuro, que nos de garantías de que lo que encaremos sea en serio. Estamos dispuestos a construir un nuevo proyecto", concluyó.