BASQUETBOL. Leonardo Gutiérrez hizo un análisis de lo que se viene para el Mundial de Turquía
"Nos ha tocado una zona muy dura. Todos los rivales son complicados y deberemos exigirnos al máximo, ya que hoy por hoy nadie te regala nada", aseveró. Y agregó que "será importante salir primero o segundo del grupo, ya que de esa manera el equipo recién chocaría en las instancias decisivas con Estados Unidos y España, que aparecen como los equipos más fuertes".
"La Argentina ha sido protagonista en los últimos torneos internacionales y este grupo quiere seguir siéndolo. Por eso llegar a una semifinal y tener la chance de pelear un lugar en el podio sería una muy buena actuación", precisó la figura de Peñarol de Mar del Plata.
Leo viste la camiseta del seleccionado argentino desde el Sudamericano de Bahía Blanca en 1999 y ha sido uno de los integrantes de la Generación Dorada que se consagró campeona olímpica en Atenas 2004. "Es un orgullo vestir la camiseta del seleccionado. Uno siente una atracción especial y no hay cansancio que valga para ponérsela", manifestó.
"Muchas veces sacrifiqué mis vacaciones para poder integrar el seleccionado, ya sea en un Sudamericano, Premundial, Preolímpico o Mundial. Lucharé para poder ganarme otra vez un lugar y formar parte del equipo en Turquía", agregó Gutiérrez.
Sobre los posibles adversarios en los octavos de final Gutiérrez dijo que "todo parece indicar que el rival saldrá de Brasil, Croacia y Eslovenia (que integran el Grupo "B"), todas potencias que están en un muy buen nivel".
Consultado sobre la posibilidad de que algunas de las figuras no estén en Turquía, sostuvo que "todos tienen ganas de ir, sienten la camiseta".
"Los casos más complicados son los Manu Ginóbili, Luis Scola y Fabricio Oberto, que terminan sus contratos. Espero que puedan renovar y formar parte del equipo. Este es un grupo muy unido y que quiere seguir haciendo historia en el básquetbol argentino".
El Círculo de Periodistas Deportivos de Buenos Aires lo distinguió por segunda vez como el mejor jugador nacional. "Es importante haber recibido nuevamente el Olimpia de Plata. Esto es el fruto del trabajo de todo un año", resaltó.
"No obstante, no hubiera sido posible que lo volviera a ganar sin la ayuda de mis compañeros de Atenas de Córdoba y también de Peñarol", remarcó. El que fuera campeón con Olimpia de Venado Tuerto, Atenas, Ben Hur de Rafaela y Boca Juniors comentó que "un premio siempre te motiva y te obliga a que te esfuerces día a día para poder mejorar tu juego y el del equipo. Se lo dedico a mi esposa, a mis hijos y a todos lo que me aprecian".
En relación con el presente que vive con Peñarol, club al que llegó en julio de este año, Leo señaló que está feliz de haber ganado el "Súper 8". "Realmente es hermoso salir campeón en tu casa y con tu gente. Es la primera vez que este club puede ganar algo de local. Ojalá, no sea el último y conquistemos muchos más. El próximo objetivo ahora es ganar la Liga Nacional", expresó.
Leonardo Gutiérrez estuvo siempre identificado con Atenas. "Yo quiero ganar siempre contra el rival que sea. Atenas es un sentimiento y pensé que iba a terminar mi carrera allí. No arreglé y busqué otro horizonte", afirmó. "Ahora estoy en Peñarol, que me contrató por dos temporadas, y defenderé a muerte esta camiseta", indicó. En la despedida, dejó una frase que sintetiza cómo siente la camiseta albiceleste.
"Uno ama la camiseta de la Argentina. Qué lindo sería poder conseguir otra medalla en el Mundial. No importa del color que sea, ya lucir una en el pecho es un gran orgullo", concluyó.