Costos policiales
En busca de una solución, los delegados decidieron que se concrete una reunión con el Municipio
La Liga de Fútbol de Olavarría pintó un panorama desalentador de cara al futuro de sus principales competencias por la presión económica insostenible que tienen ante sí las instituciones por el costo de los operativos policiales.
Este miércoles en la reunión del Comité Ejecutivo se dialogó sobre las distintas alternativas que se podrían tomar para afrontar el gasto que genera la contratación de la Policía Bonaerense para los partidos de la Primera División.
El reciente aumento otorgado por la Gobernación Provincial a los uniformados, provocó que el costo de organizar un encuentro se eleven a una cifra muy difícil de cubrir.
A un promedio de 10 efectivos más el costo de la terna arbitral, los clubes deberían erogar 12 mil pesos para abrir la cancha.
¿Qué hacer?, es lo que se preguntan clubes y dirigentes de la LFO. En algunas ligas se optó por no jugar (San Nicolás y Mercedes); en otra (Pringles) se contrató seguridad privada y la Aprevide le clausuró los estadios, mientras que en Chacabuco el Gobierno Municipal se hará cargo de los costos que demandan los operativos de seguridad.
En Olavarría, se envían no menos de ocho efectivos por partido, cifra que aumenta considerablemente en los partidos de Racing.
Los clubes no cuestionan el aumento, se cuestiona la cantidad, muchas veces excesiva, de agentes o que repercute directamente en el costo.
En busca de una solución, los delegados decidieron que se concrete una reunión con el Municipio y también se esbozó que se comiencen a jugar dos encuentros por estadio para ver si de esa manera se pueden reducir los gastos.