Gámez, otro que se subió al ring en la pelea con el gobierno

El presidente de Vélez Sarsfield, Raúl Gámez, calificó de "perverso" al gobierno nacional y dijo que es "vergonzoso lo que hace con el fútbol, cuya dirigencia reclama que se le pague una cuota de la transmisión de partidos de 350 millones de pesos y la rescisión del contrato por los derechos.

"Estamos frente a un gobierno perverso. Qué ironía!, quiero que le vaya bien a nivel nacional pero es vergonzoso lo que está haciendo con el fútbol", sostuvo Gámez y admitió haber hablado con dirigentes de UTEDYC, cuyos afiliados son los trabajadores en los clubes, que podrían quedarse sin trabajo.

Confió que les dijo que "estén atentos porque van a perder el trabajo si no afloja el gobierno y hace las cosas como corresponde". Gámez aseguró que la intervención fue "propuesta por el Gobierno" pese a que el nombramiento oficial llegó desde Zurich. "FIFA ni sabe lo que pasa acá", aseguró, asimismo, el dirigente velezano.

El directivo dijo que los clubes están en una "situación de desprotección total", apuntó contra el secretario general de la Presidencia, Fernando De Andreis, por hablar "pestes" de los dirigentes, y admitió haber cometido "muchos errores en el tiempo aceptando las decisiones de Grondona y las mentiras que nos fue diciendo esta comisión a propuesta del Gobierno".

"Ayer se decidió que Javier Medín sea el interlocutor de la gente del fútbol y mandamos a un interlocutor que es del gobierno. Somos unos mamelucos bárbaros", reconoció.