FUTBOL

Senzacqua arregló y se suma a los entrenamientos

Torneo Federal "C"

El arquero tendrá su tercer paso por Racing, donde llegó en enero de 2005 y siguió hasta junio de 2006, para regresar en la temporada 2009/10, con Hugo Tenaglia y Francisco Russo como entrenadores.

En horas de mediodía llegó el acuerdo y Gabriel Senzacqua lucirá por tercera vez en su carrara el escudo de Racing estampado en su buzo de arquero, para jugar la edición 2017 del Torneo Federal "C".

El bahiense llegó a Racing por primera vez en enero de 2005, para reemplazar a Víctor Sieracki, y fue el arquero titular del equipo que logró el histórico ascenso al Argentino en mayo de ese año con Hugo Tenaglia como entrenador.

En la principal categoría del interior arrancó como suplente de Mariano Cándido, pero luego de un irregular inicio del ex Banfield de Mar del Plata se hizo cargo del arco chaira, y con Francisco Russo fue titular en todo el torneo Clausura, donde Racing evitó el descenso directo, pero no pudo superar la promoción ante Rivadavia de Lincoln.

El bahiense estuvo en Juventud Unida Universitario de San Luis con su amigo Adrián Rodas, recaló en Mandiyú de Corrientes y volvió a Racing para el Argentino B 2009/10, otra vez con Hugo Tenaglia como entrenador, con uno de los mejores registros en la historia de este certamen. 

Un equipazo que no pudo superar la primera instancia de playoffs, en el Apertura ante La Emilia, y en el Clausura con Douglas Haig de Pergamino, equipo que luego lograría el ascenso.

Pasó por Ferro, estuvo en el fútbol de Pehuajó, jugó dos ediciones del Federal C con la casaca de Estudiantes, defendió el arco de Loma Negra, y este mediodía se produjo el segundo regreso al Parque Olavarría, tras aquella primera incursión, que arrancó con una goleada memorable a Santamarina, la manaña de un domingo de enero de 2005.

Senzacqua se suma así a otros muy buenos refuerzos locales que han llegado al chaira, como Nicolás Di Bello, Maximiliano Chevrot y Lorenzo Ferrara.

Ahora Racing espera cerrar antes de fin de año tres o cuatro refuerzos foráneos de jerarquía (uno o dos marcadores centrales, un volante central, un delentaro de punta) y no se descarta la llegada de un par de jugadores locales, para cerrar el plantel que intentará regresar al lugar que mínimamente merece su historia en el fútbol del interior.

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