AUTOMOVILISMO. El piloto de Salto se quedó con el penta y Ugalde con la final del TC en el "Gálvez" El Guille llegó séptimo en la última carrera del año y con eso le alcanzó para ganar el Campeonato 2008 de Turismo Carretera. Guillermo ya había ganado los títulos 1998, 2000, 2001 y 2002.
Con el séptimo puesto conseguido en la última final del año del Turismo Carretera en el autódromo porteño, Guillermo Ortelli (Chevrolet) sumó ayer su quinta corona en el Turismo Carretera y dejó su título a Juan Manuel Silva, pese a haber sido el que sumó más puntos en el torneo 2008.
El triunfo en la carrera fue para el marplatense Lionel Ugalde (Ford) ante un imponente marco de público pese a la lluvia que golpeó en la primera parte de la mañana, aunque no afectó la final.
El nuevo título le permite al "Guille" de Salto instalarse definitivamente en la galería de los grandes pilotos argentinos que pasaron por la máxima categoría del automovilismo nacional al igualar al "Aguilucho" Oscar Gálvez, está a uno del "Flaco" Juan María Traverso y a cuatro del máximo ganador, Juan Gálvez.
Con la obtención de la "Copa de Oro" por Ortelli y el "Pato" Juan Manuel Silva (Ford) como piloto más regular del año y subcampeón en los guarismos (aunque para muchos es el verdadero dueño de la corona), el JP Racing que alberga a ambos pilotos, resultó la escudería que arrasó con todos los premios.
Para llegar a su quinto título, Ortelli fue el piloto que más puntos sumó en las cinco últimas fechas del calendario, cuando la ACTC implementó el sistema de los "play off" donde los 12 pilotos mejor ubicados hasta la carrera de Salta debieron dirimir la corona.
Hasta ahí, Silva había sido el más regular y por lógica conseguido una ventaja apreciable, pero llegó la "Copa de Oro" y comenzó un nuevo campeonato donde el ahora quíntuple campeón dominó, pese al gran esfuerzo del final que hizo el chaqueño tocado en lo más hondo de su amor propio.
La carrera, muy veloz por cierto y con una sola neutralización (despiste de Ariel Pacho en la horquilla en la vuelta 15) tuvo dos dominadores. Hasta la octava vuelta fue Marcos Di Palma (Chevrolet) el que marcó el rumbo, pero en el noveno giro erró un cambio y permitió el avance de Ugalde, quien se había mantenido expectante.
De ahí, hasta la vuelta 23 Ugalde reguló las diferencias, mientras que a sus espaldas Di Palma, Emanuel Moriatis (Ford) (ganó su serie pero no le alcanzó para llegar con chances a la final) y Silva.
Mientras, desde atrás Ortelli venía haciendo su carrera tratando de evitar al máximo cualquier tipo de riesgo que pudiera poner en peligro su mayor objetivo, además con estar entre los diez primeros tenía asegurado el título.
Fue así que Silva, a pesar de conseguir el segundo lugar después que Moriatis y Di Palma tuvieran un roce bastante fuerte, se resignó, lo mismo que su amigo Ugalde, quien había adelantado que haría todo lo posible, incluso bajarse de la punta, para que el chaqueño se llevara la corona.
En resumen, primero fue Ugalde, segundo Silva, tercero Marquitos, cuarto Moriatis, quinto Christian Ledesma (Chevrolet), sexto José María López (Chevrolet), séptimo Ortelli, octavo Emiliano Spataro (Chevrolet), noveno Diego Raúl Aventín (Ford) y décimo Norberto Fontana (Ford).
No fue como deseaba la gente del óvalo porque el título viajó para Salto y todos contentos porque los de Ford, incluido el propio Silva, consideraron que debía ser para el "Pato" chaqueño.
No obstante, Ortelli lo festejó como el más preciado de los cinco campeonatos que ahora acumula y toda la parcialidad del Chivo de parabienes.
De esa manera, con final caliente y apasionante, el TC bajó el telón de una nueva temporada en la que hubo de todo, como en botica.