Fernando Brandán El ex jugador de Racing fue una de las figuras en la derrota de Temperley ante Boca, ganando su duelo individual con Monzón.
El país futbolero conoció el domingo a la noche a ese pequeño de habilidad rara, camorrero, valiente con la pelota y sin ella, que volvió loco a Monzón y provocó una gran atajada de Orión cuando el partido estaba 0 a 0. Fernando Brandán, el pibe mendocino que debutó en Racing el último domingo de enero de 2012 y afianzó tanto su vínculo con la ciudad que hasta una familia le dio.
Este lunes, como a Racing en Neuquén, para Temperley y para Brandán la derrota frente a Boca fue menos derrota, sobre todo para el mendocino que hizo un buen partido, y fue toda una complicación para Monzón en el lateral izquierdo de la defensa de Boca.
"Era un gran desafío para todos nosotros, fue como un gran sueño para este plantel, que hace un año estaba peleando por clasificarse en la B Metropolitana. Salió un trámite muy intenso, pero hicimos un partido digno y nos dejó cosas muy positivas y en mi caso estoy feliz por haber vivido algo tan lindo" confesó Brandán
"Fue un partido de muchos duelos individuales y a mí me tocó Monzón, que es un buen jugador, de mucha experiencia. Traté de hacerle siempre la diferencia por afuera, que son las jugadas que más le duelen a las defensas" contó.
Esa jugada cara a cara con Orión también formó parte del relato. "Toda mi vida me voy a acordar de esa jugada, por lo que hubiese significado para mi carrera, pero Orión achicó muy bien y me tapó rápido" contó.
Su última frase no fue para Temperley, ni para Boca, sino para el club que le abrió las puertas cuando en Quilmes estaban todas cerradas. "Como siempre, para sacarse el sombrero lo de los chicos en Neuquén y para aplaudirlos de pie. El jugador de Racing tiene hambre en todas las canchas y eso se reconoce".
