Argentino A Racing perdió 3-1 con Santamarina en Tandil y quedó eliminado, con un arbitraje escandaloso del chaqueño Mazón, que lo privó a los 3m. de un penal y la expulsión del arquero Bertoya, por una durísima entrada que obligó al reemplazo de Abán.
Fotos: Claudio Martínez
Siempre existió la sospecha de que hay demasiada fábula detrás de las cosas que se hablan acerca de manejos turbios en el fútbol; tal vez por eso mismo y por el temperamento del protagonista nadie dio demasiado crédito a las advertencias que se escucharon durante toda la semana en Olavarría.
Víctor Milanese Commisso denunció sin diferenciar interlocutor ni contexto que Racing no tenía ninguna chance en Tandil; que desde Córdoba le habían advertido (y desde Chaco a Franco Amaya) que la gente de Santamarina se había encargado en la semana de contar con un árbitro "a medida" para la revancha, y que éste no era otro que Miguel Mazón, el chaqueño golpeado por los dirigentes de Juventud luego de una labor más que cuestionable la noche que Talleres visitó San Luis.
Hasta allí, nada que se no haya dicho en la previa de algún cruce importante. Pero la alarma se encendió aún más con la llegada de los enviados de EL POPULAR Medios al "General San Martín " de Tandil.
Siempre hay algún colega anfitrión con el que median 20 años de conocimiento y de compartir canchas, cabinas y vestuarios. "Daniel, esto ya está; Racing ya está eliminado del campeonato" comentó.
Pareció una chicana, pero enseguida llegaron más datos. "El lunes Fulano de Tal (importante referente de la dirigencia de Santamarina; se preserva el nombre por razones obvias) nos llamó a varios periodistas de acá y nos dijo que no había de que preocuparse por el Pitu (Arnaldo González); que a pesar de que en Olavarría lo expulsaron por una agresión, de que increpó al árbitro y se fue haciendo gestos a la platea, no le van a dar más de una fecha. Y el árbitro está arreglado. Hoy acá gana Santamarina".
Otro dato fuerte, pero sin demasiado sustento técnico. Claro, después el partido entrega indicios, y a los tres minutos uno que cambiaría para siempre la suerte de la serie, y hasta la forma en que ambos equipos quedaron luego de esta clasificación de Santamarina y la eliminación de Racing.
En una salida rápida buscaron a Gonzalo Abán a espaldas de Aguirre, la duda del defensor le dio tiempo para llegar sin problemas a la pelota y cuando se abrió hacia la izquierda Bertoya le cometió uno de los penales más violentos, groseros y burdos que se hayan visto en medio siglo de competencias regionales.
Era penal, expulsión del arquero por abortar una situación manifiesta de gol, y para Racing la alternativa de poner una distancia de dos goles en esta serie con Santamarina. Mazon, corriendo atrás de la jugada, hizo señas con sus manos de que no había pasado absolutamente nada.
Ni siquiera esperó un par de segundos para comprobar la lesión de Abán (que lo sacó del partido), y el golpe que dejó a Bertoya un par de minutos tendido en el piso. Por lo obsena, alevosa, incompresible, sospechosa decisión arbitral, a partir de esta jugada, todo lo demás será pura anécdota.
No el desenlace, del que Racing salió con más grandeza de la que llegó hasta este sitio, y Santamarina con una mancha que no podrá limpiar ni un ascenso a la elite del fútbol argentino, porque todo lo que sucedda de aquí en más será bajo la sombra de la sospecha.
También hubo un partido que Santamarina salió a jugar con furia, como para evitar sufrimientos demasiado prolongados, y en apenas dos minutos tuvo una gran aparición de Michel en la izquierda, que controló Mocoroa en el primer palo, y un corner del mismo Michel que peinó Ledesma en el primer palo y la pelota cruzó toda el área chica.
Pero en el medio quedó ese vergonzante episodio del minuto tres y nadie podrá abstraerse de semejante condicionante. La búsqueda obsesiva de Santamarina será insignificante ante tamaño despojo: Bucci apareció en la izquierda y volvió a exigir a Mocoroa; una media tijera de Michel pasó cerca; una aparición de Brittes terminó cerca del palo izquierdo.
Pero, aún sin su mejor jugador para la contra desde muy temprano, porque otro dato insoslayable es que Racing se quedó sin Abán antes de los 10m, el chaira se defendió muy bien, con un gran Amaya y un extraordinario Ramiro Jorge en el borde del área.
Racing también tuvo las suyas, no vaya a creer... No terminó bien una contra de Loncón con superioridad numérica; Berdún desde la medialuna invocó una gran tapada de Bertoya y -en la última jugada, antes del descanso- Amaya buscó a Altamirano en la izquierda, le ganó el forcejeo a Aguirre, cedió a Berdún, y la continuidad de la jugada vio solo a Calderón Rosales, en el punto de penal, con Bertoya: controló, miró, ejecutó, y la pelota se fue apenas al lado del palo izquierdo.
"Esa jugada hubiese cambiado el partido tanto como el penal", admitiría un rato después Bertoya, en vestuarios.
La búsqueda de Santamarina empezaba a convertirse en desesperación: hubo una pelota preciosa que el chileno no pudo controlar dentro de área, otro parecida para Altamirano, y otro doble penal obsceno a Jorge y Vazzoler en una pelota parada.
Cuando los minutos empezaban a convertirse en una tortura para Santamarina (a esa altura había salido Ledesma, y jugaba con tres arriba) Strada escapó en la izquierda, metió la pelota en el área, y con la punta del zapato Michel el cambió la trayectoria a Mocoroa.
Herido por las ausencias (sobre la hora se supo que Molina y Draghi no llegaban), cacheteado por tantas injusticias a lo largo de la temporada, la tarea era ciclópea para Racing, que se adelantó, buscó, pero descubrió espacios que Santamarina aprovecho para aumentar.
Pero tuvo el empate. Vazzoler capturó en la izquierda un pase de Amaya, llegó al fondo, y metió un zurdazo al primer palo que Bertoya cacheteó de milago.
En una contra Brittes ganó las espaldas de Nasello, definió sobre Mocoroa, el defensor llegó justo sobre la línea, pero no pudo evitar que la pelota vuelva al delantero de Santamarina.
Como golpe de gracia, Strada partió en una posición más que dudosa en la izquierda, se fue hasta el área y la picó sobre el achique de Mocoroa.
Para cerrar, en una decisión que sólo agrega más sospechas sobre la atribulada conciencia de Mazón, dio un penal-consuelo que Altamirano convirtió.
Racing dejó el Argentino A con grandeza, Santamarina en su continuidad no podrá evitar la sombra de la sospecha.
En tiempos donde el despacho de la casa de todos los olavarrienses se abre para los deportistas, merece un reconocimiento por lo que hizo y hasta adonde llegó.
Para los dirigentes comenzó un corto tiempo de balances y evaluaciones. El comienzo de la siguiente temporada no está tan lejos, este lugar en el Argentino A es una joya para el deporte olavarriense, y deberán evaluar si tiene sentido seguir en las condiciones de este año, con tanto desamparo, tanta discriminación y tantas ofensas...
Esta es la síntesis del partido:
Santamarina de Tandil: Daniel Bertoya; Juan Compagnucci, Martín Aguirre, Emiliano Capella, Ledesma (ST 10m. Valerio); Román Strada, Germán Palacio, Miguel Monay, Diego Bucci; Michel (ST 23m. Leonardo Gogna), Edgardo Brittes (ST 35m. Timpanaro). DT: Gustavo Coleoni
Racing A. Club: Martín Mocoroa; Esteban Erramuspe, Ramiro Jorge, Cristian Draghi, García Lorenzo; José Loncón, Franco Amaya, Vazzoler, Berdún (ST 20m. Maximiliano Chevrot); Gonzalo Abán (PT 8m. Alfredo Calderón Rosales) y Oscar Altamirano. DT: Víctor Milenese Commisso
Goles en el segundo tiempo: 15m. Martín Michel, 34m. Brittes y 39m. Strada (S); 37m. Oscar Altamirano, de penal (RAC)
Amonestados: Erramuspe, García Lorenzo, Altamirano (RAC); Monay y Michel (RS)
Arbitro: Michel Mazón (0), de Resistencia. Arbitraje escandaloso; incidió directamente en el resultado del partido y en el desenlace de la serie.
Estadio: "General San Martín", de Tandil
OTROS RESULTADOS
San Jorge 1-San Martín 3 (pasó San Martín con un global 6-3)
Maipú 2-Gimnasia y Tiro de Salta 0 (global 3-3, pasó Maipú por ventaja deportiva)
Sportivo Belgrano 4-Juventud Antoniana 1 (global 5-1)
SEMIFINALES
Maipú vs. Santamarina
San Martín vs. Sportivo Belgrano