Hockey
"Lucha" finalizó este sábado su visita a Olavarría con una clínica en el Club Atlético Estudiantes, y como corolario se involucró en un serie de picones con los doscientos chicos que participaron de una mañana histórica para el deporte de la Ciudad. Galería de imágenes.
Fotos: Marcelo Kehler
En su hábitat natural, con el stick y con la bocha, en la última hora de su inolvidable clínica de hockey, Luciana Aymar mostró su mejor versión, la más distendida, pero también la más esperada, y fue la cadena de picones a cara e''perro que empezó jugando con las nenas y terminó con los varones de la primera división de Estudiantes.
Nada nuevo bajo el sol; desde su primer contacto con la bocha, a pesar de la informalidad, de la carencia de espacios en un cuadrilátero de 20x10 con un par de conos en cada arco, su excelsa técnica individual dejó arranques para el asombros, slaloms que son su marca registrada y también ese carácter indispensable para ser la número uno del mundo, que aflora aún en las bromas.
"Pancho y la p... que te p... me robaste la bocha" le grito al pibe Zyla, uno de los mejores proyectos de la cantera bataraza, para provocar la carcajada en todo el perímetro de la improvisada canchita de hockey. Y como cierre, los festejados encuentros en espacios reducidos con "Pancho" Amoroso y el "Negrito" Fresta, su mejor cómplice con la bocha en el césped sintético albinegro.
La clínica duró exactamente tres horas y se realizó este sábado en la cancha de césped sintético del Club Atlético Estudiantes, en el marco de su visita a la Ciudad con motivo del relanzamiento de las plataformas digitales de EL POPULAR Medios, y contó con el auspicio de Loma Negra, Municipalidad de Olavarría, Haras Amancará y VITAL Sem, servicio de emergencias médicas.
Empezó a las 10.20 y terminó a las 13.18, después de un par de actos protocolares que habían quedado como remanente de la jornada de viernes: Mario Coppola, el presidente del Círculo de Periodistas Deportivos de Olavarría entregó una presente en nombre de la entidad; luego Carlos Emiliozzi (presidente de la Comisión de hockey) y Marcelo Safenreider (titular de la Federación Tandilense) pusieron en sus manos un delicado presente floral.
Participaron de la clínica chicos de Estudiantes, y de clubes visitantes, que arribaron desde Sierras Bayas (San Martín), Laprida (Lilán), General La Madrid (Barracas), Pehuajó, Chillar (Huracán), Azul, Bolívar y Cañuelas.
Cuatro estaciones, haciendo hincapié en trabajo de técnica individual. Conducción con pases barridos y de pegada, habilidades aéreas; en otra estación juegos en espacios reducidos; pegadas al arco con los varones sobre la cabecera que da al sector rugby; pases levantados, recepción y técnica individual con la bocha en el aire; técnica individual con giros, controles picados y remates al arco.
Una vez culminado el circuito, casi tímidamente, como a escondidas, sobre el costado que da a la calle Independencia, Lucha se involucró en los primeros picones con las más chicas. Cuando tranco inconfundible, llevando la bocha pegada al palo, trascendió a todo el perímetro de la cancha, empezó lo mejor, lo más entretenido, lo que nunca podrán olvidar los doscientos pibes de Olavarría y la zona, que dentro de muchos años podrán contar que jugaron, corrieron, forcejearon, tiraron paredes, festejaron goles o se comieron caños con la mejor deportista argentina de todos los tiempos,
Antes de irse Lucha Aymar hizo la recorrida final por el campo de juego, donde la esperaban formados los grupos de chicos que participaron de la clínica para tomarse esa foto que nunca más descolgarán de un lugar privilegiado de sus memorias y ni del mueble más importante de sus livings.