BASQUETBOL. La Argentina le ganó a Australia y se consagró campeón del Diamond Ball
De esta manera, la Argentina consiguió también el objetivo de llegar con un título a Beijing, donde intentará defender la medalla de oro conseguida en Atenas 2004. La Argentina y Australia compartirán el Grupo "A" de los Juegos de Beijing con Irán, rival al cual los de Hernández también superaron en este mismo torneo (el restante fue Serbia), Rusia, Croacia y Lituania.
Andrés Nocioni fue quien brilló en un opaco primer tiempo argentino ante Australia, mientras que Luis Scola y Emanuel Ginóbili se pusieron el equipo al hombro para la remontada final que culminó con la victoria de los campeones olímpicos, quienes llegaron a estar 19 puntos abajo.
En la primera mitad del encuentro, el elenco del "Oveja" Hernández no consiguió hilvanar un buen funcionamiento ofensivo y se mantuvo en partido sólo por la excelente tarea en el tablero contrario de Nocioni (culminó el cotejo con 20 puntos y 8 rebotes) y la buena efectividad en lanzamientos libres (16 de 19).
En tanto, Ginóbili, Oberto y Scola no acompañaron el buen rendimiento del alero de Chicago Bulls, y Prigioni no fue el conductor incisivo y preciso que suele ser. El conjunto australiano, por su parte, aprovechó a la perfección los huecos defensivos que dejó la Argentina para castigarla con tiros de media y larga distancia.
Así, el campeón oceánico fue construyendo de a poco una marcada superioridad que se vio reflejada en los once puntos que sacó de diferencia en el parcial del segundo cuarto, para culminar la primera mitad arriba por 47 a 35.
Pero el tercer capítulo trajo consigo un pasaje por demás inspirado de Scola, que anotó 28 de sus 32 puntos en la segunda mitad. Secundado por Ginóbili (24 puntos y 2 asistencias), Scola fue el comandante de la remontada albiceleste que cerró el parcial 27 a 22 en su favor y redujo la brecha a sólo siete puntos.
En el último cuarto Australia, que ya no mostró la misma precisión en lanzamientos largos que en la primera parte del encuentro, cedió ante la potencia ofensiva argentina, quien de arremetida pudo revertir el resultado. Un triple de Glen Saville a pocos segundos del final le puso algo de suspenso al partido, pero allí apareció la experiencia de Ginóbili para liquidar el pleito desde la línea de libres y definir el encuentro en favor del campeón en Atenas 2004.