Zambas, gatos, escondidos, chacareras y muchos carnavalitos son parte del menú que eligen entre todos los músicos.
Se llaman "Cautivos". Tienen estilo propio musicalmente. Se muestran con jeans, y remeras negras ("Nunca un paso atrás" estampado delante y Cautivos Laprida en su espalda). Cosechan ascendencia en mucha gente joven.
Nacieron como tantas formaciones musicales, guitarreando de amanecidas en la vigilia nocturna de una jornada de doma. Bastó para que alguien de la rueda de oyentes dijera: "no se animan a tocar en una fiesta". Así comenzaron y no han parado más.
Fueron invitando voces y violeros hasta que quedaron plantados "los cuatro de adelante y Julián Torres en la batería", contaron Pablo Mendioroz y Nicolás Cárceles, raíz ambos del grupo.
Pasó el tiempo y llegó Nico López que estudia música en Tandil (guitarra y flauta traversa) y Guille Luca (bajo) una de las últimas y muy buenas incorporaciones. Julián Corrientes (versatilidad y calidad) y Matías Quevedo (primera voz) forman parte desde los inicios.
El repertorio se elige entre todos -agrega Cárceles- y tiene como principal condimento que sea "festivalero, alegre, de calce para una peña para participar con la gente y que el público sea parte del repertorio".
Zambas, gatos, escondidos, chacareras y muchos carnavalitos son parte del menú.
No falta algún corte romántico como "Canción para una mentira" que popularizara el grupo Los del Suquía y para cosechar miradas "La Noche sin ti" de Los Huayra "siempre paga".
Estuvieron el domingo en el atardecer algo fresco del Anfiteatro de "El Paraíso" y ya pusieron primera para comenzar con los ensayos y preparar un espectáculo que se viene con el carnaval del norte.
Una propuesta presentada a la Dirección de Cultura que tuvo eco, para revivir una fiesta como se vive allá en Jujuy. "Hemos ido a fiestas en la cual se hace este tipo de celebración y es muy lindo, se juega con harina, con albahaca y vale todo. Uno baila con el de al lado, interactúas con todos y esa es la idea, queremos ver si la gente nos acompaña y estamos viendo de qué manera reflejarlo para disfrutar la gente abajo y nosotros arriba", imagina Mendioroz.
El 23 de enero pasado cumplieron un año desde que empezaron a ensayar y se afianzan en cada show. Sienten esa evolución, suenan compactos. Claro, se juntan hasta tres y cuatro veces por semana para ensayar y eso se refleja claramente. Esas horas de ausencia cuentan con el guiño de sus familias apoyan y esa es otra clave fundamental.
Vienen desarrollando un verano intenso. Finalizaron en 2018 en la fiesta del aniversario de Bomberos Voluntarios de Laprida, en el inicio de 2019 lo hicieron en el exitoso festival del Sindicato Municipal, lo hacen en fiestas particulares y pronto se viene una recorrida por los diferentes restaurantes y pubs de Laprida "para darnos una mano recíprocamente", dicen. Rincón de Sabores, Bartolo´s y estaba pendiente el arreglo con Vigga´s patio cervecero.
A estar atento: Cautivos sale de marcha pronto. Y esta bueno encontrarlos en alguna esquina o rincón para saborear folclore y del bueno.
