Durante el fin de semana A lo largo de tres días, más de 50 agrupaciones artísticas y solistas participaron de las distintas actividades que culminaron con un baile. La plaza San Martín vivió una verdadera fiesta cultural.
Más de 30 grupos de La Madrid y la zona pasaron por el escenario.
En la plaza hubo un espacio para juegos didácticos.
Cuerpos de baile de distintos géneros deleitaron al público, que se acercó masivamente a la plaza.
El arte urbano tuvo sus diversas manifestaciones.
El Festival le dio espacio también a jóvenes emprendedores y artistas.
El Festival tiene un arraigo especial en la ciudad y sus alrededores, por eso cada año se vive una fiesta. Son días donde el arte se respira en su máxima expresión.
Desde la presentación de don Alfredo Chiste que con sus 92 años continúa demostrando su sapiencia musical hasta las nuevas tendencias del Rap-Trap y las sesiones de DJ tuvieron su espacio, y el público lo disfrutó. Durante las tres jornadas hubo presentaciones artísticas variadas y para todo el público, también hubo un espacio de juegos y arte, que sumó una alternativa a la hora de ocupar los espacios en la plaza.
Algo similar ocurrió con los stands de los artesanos y juegos. En síntesis, fue un gran Festival de la Creación que supo aggiornarse a la actualidad pero que mantiene su raíz: le dio su merecido espacio a los jóvenes a través de la música pero especialmente en las danzas, y también lo tuvieron los mayores.
El Festival le volvió a dar vida al árbol fundacional de la plaza gracias a la intervención de la artista Adriana Pantanali.
Hubo rock, jazz, folclore, reggaeton, break-dance y cumbia. Todos los géneros musicales convivieron en el mismo espacio junto a las danzas en dos escenarios montados en sincronía que le dieron una vitalidad reclamada durante mucho tiempo.
Pasó un nuevo Festival de la Creación y los lamatritenses lo vivieron a pleno, desde el primer y hasta el último momento.
