Tras la colisión resultó despedida del auto en el que viajaba junto a su madre y su hermana, apenas un par de años mayor. Sufrió gravísimas heridas y su muerte se confirmó pocos minutos más tarde, cuando era atendida en el Hospital Municipal. Se investiga la condiciones en las que se produjo el siniestro.
El caso se registró alrededor de las 11.30 sobre el cruce de Necochea y Laprida, donde colisionaron violentamente un Volkswagen Gol, guiado por Aurelio Fernández, y una camioneta Renault Berlingo conducida por Emilce Pozo Davico. Fue la violencia del impacto que éste último rodado protagonizó un vuelco, finalizando la marcha apoyado sobre uno de los laterales.
Fue precisamente durante el vuelco cuando una de las hijas de la víctima, Esmeralda, resultó despedida y sufrió severas lesiones que instantes después le ocasionaron la muerte. De acuerdo con lo que trascendió fueron los agentes policiales del Comando de Patrullas, quienes fueron los primeros en arribar, quienes concretaron el traslado de la niña al Hospital Municipal "Doctor Héctor Cura" debido a la delicada condición que presentaba. Inclusive, también se logró conocer que Fernández habría colaborado también para el rescate de la víctima fatal.
Su hermana, dos años mayor, y la madre también debieron ser sometidas a distintas curaciones y cuidados médicos, pero afortunadamente sólo sufrieron lesiones de menor carácter. El conductor del Gol, por su parte, resultó ileso.
También trabajaron en la escena especialistas de la división Científica de la policía Bonaerense, quienes realizaron pericias planimétricas y accidentológicas que en las próximas horas llegarán a la mesa de trabajo de la fiscal de la causa, la doctora Susana Alonso, de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 7. Otro de los aspectos a esclarecer es cuál era la situación de la víctima fatal en cuanto a la utilización no sólo del cinturón de seguridad, sino también de los denominados dispositivos homologados de retención infantil, cuya obligatoriedad de uso para niños fue impuesta meses atrás a partir de una modificación en la Ley Nacional de Tránsito.
Por lo pronto Fernández, quien se dirigía con destino a su casa, ubicada a pocas cuadras del lugar del siniestro, fue imputado de manera primaria por "homicidio culposo". Ya fue sometido a diversas medidas de prueba rigor y sería citado a declarar en las próximas horas.
Ocho víctimas
El fallecimiento de Esmeralda Pozo Davico se tradujo en la octava muerte en siniestros viales en lo que va del presente año. Con la particularidad que tres de ellas se registraron tan sólo en días.
El antecedente más reciente ocurrió 6 días atrás sobre la Ruta Nacional Nº 226, donde un joven de 19 años murió cuando el auto que tripulaba se despistó y cayo en aguas del arroyo Las Flores, cerca de Espigas. Fue en la tarde el 21 de mayo cuando se produjo la muerte de una mujer de 41 años que circulaba en bicicleta en las cercanías de L´Amali, donde fue impactada por una camioneta.
Fue a inicios de abril cuando se confirmó la muerte de un hombre de 54 años que había protagonizado un siniestro vial también sobre un camino vecinal, pero en la zona de Hinojo. Días antes, sobre el cierre de marzo, resultarían estériles los esfuerzos de un hombre de 80 años que permanecía herido desde hacía varios días tras haber sido atropellado en la zona del cementerio.
Los casos restantes se dieron en febrero. El primero sobre la Ruta 51, donde dos personas murieron tras el choque de un auto y un camión, mientras que el caso restante se dio a fines de ese mes tras un choque entre una moto y un camión en nuestra ciudad. La víctima tenía 54 años.