"Es muy lindo trabajar en la pared porque te hace compartir con otros"

Durante el fin de semana, profesores y alumnos de la EP N° 9 junto con el Centro de Actividades Infantiles que funciona en la institución pintaron un mural en la escuela. El mismo fue realizado y supervisado por el reconocido artista lamatritense Juan Bautista Olmedo que transitó parte de su educación por allí. EL POPULAR habló en exclusiva con él sobre las sensaciones de estar nuevamente en la ciudad y en el establecimiento.

Mientras el sol del mediodía aprieta, el grupo busca de artistas busca el último resquicio de sombra para dar los retoques. Juan Bautista Olmedo da indicaciones sobre qué colores elegir y dónde ubicarlos en el enorme mural que cubre el frente de la escuela.

Entre mates y risas se encuentra con las autoridades de la institución y también con aquellos que alguna vez fueron sus compañeros.

"Volver a La Madrid y a esta escuela me pone muy contento", dice. "Este proyecto se venía hablando hace mucho y recién ahora me pude hacer un lugar para venir. Es una manera de apoyar a la escuela donde yo hice la primaria", repasa este hombre que aún en su retina retiene las imágenes de ese barrio y esa institución que hoy ya no son iguales que cuando era un niño.

El mural fue realizado por iniciativa del CAI que funciona durante los fines de semana y las autoridades de la EP, que, con anterioridad, hicieron un trabajo de hermoseo en el interior de la institución.

"Me pone muy contento que además de los profesores haya personas del barrio que se sumen a la iniciativa", indica.

La pared, un gran lienzo

En el mural se pueden observar figuras de animales y personas. El colorido domina la escena. "Me gusta trabajar más sobre la pared que en bocetos. Si bien tenía una idea cuando llegué la fui cambiando", cuenta sobre el diseño. "Es muy común después de haber dibujado el boceto que se me vayan ocurriendo los colores, los tramas y otras figuras", detalla.

"Mi poética son los peces y los diferentes animales. Voy trabajando lo que representa más mi obra: el hombre es el creador y para mí es muy representativo… son cosas que mamé de chico y aún hoy conservo esas imágenes y trato de representarlas en todos los trabajos", señala.

Juan Bautista se crió en el "Pueblo Nuevo" de La Madrid. Pasó mucho tiempo y de aquel paisaje semicampestre hoy queda tan solo una porción. Sin embargo en su esencia se mantiene.

Como también se mantiene la imagen de Alfredo Mángano, el director de la Escuela cuando él recorría sus aulas. "Está muy distinta a cuando yo venía pero igualmente tengo los mejores recuerdos de este lugar porque son parte de mí, de mi niñez.

"Es muy lindo trabajar en la pared, es simple pero especialmente te obliga a trabajar con otros y compartir. Yo pinto cuadros pero los hago en mi taller; hacerlo en una pared, al aire libre y en una escuela como esta te ayuda a conectarte con otras personas", remarca. "Es lindo porque es una labor colectiva y es un arte urbano. Después forma parte del paisaje del lugar y se muestra mucho más a las personas", analiza.

Renovarse es crecer

Juan Bautista Olmedo ha hecho grandes esculturas que se han destacado por su calidad. "Hacer esculturas me gusta mucho más. Es más fuerte, tiene más presencia porque es tridimensional; la pintura me gusta porque tiene sus secretos", indica.

"Yo comencé a dibujar siendo muy chico y ahora sigo buscando, experimentando. Este -dice mirando el mural- es más pop pero trabajo con manchas, con líneas, a veces estructurándome y otra no. Uno va cambiando su obra para no aburrirse; con la escultura pasa lo mismo: arranqué con chatarra y ahora trabajo con chapa batida, siempre con el hierro. El artista se tiene que ir renovando para no cansar", cuenta.

"Ahora estoy trabajando en un proyecto en conjunto con la ciudad Azul y se denomina "La línea azul". Son 18 cuadras que son intervenidas con murales; yo estoy haciendo esculturas funcionales porque tienen una representación y van a servir de contenedores de basura", repasa sobre su actualidad.

Además Olmedo inauguró una muestra en la Escuela de Bellas Artes de Azul y el próximo fin de semana presentará un trabajo en el hipódromo de esa ciudad.

"Como estudiante dejo mucho que desear (risas). Desde muy chico me interesó el arte y me gustaba pintar, con los años pintaba en mi casa y no se lo mostraba a nadie. A los 35 años conocí a Carlos Regazzoni y fue él quien me dio el impulso, también tuve la posibilidad de trabajar junto a artistas de La Boca y de Capital que me ayudaron mucho para sumar experiencia y coraje, hace diez años que me dedico de lleno a producir", termina.