LAMADRID

A la aventura para conocerse

La historia del brasileño que llegó a La Madrid en bicicleta

"Lo interesante es salir de tu zona de confort". Esa premisa define el viaje de Vicente Siufi, un brasilero que se animó a dejar atrás su casa y su trabajo para poder disfrutar de la tranquilidad y los paisajes, montado en una bicicleta que parece una extensión de su cuerpo. Llegó hasta La Madrid y se alojó en el Cuartel de los Bomberos Voluntarios. "A pesar del cansancio y de los dolores no me arrepiento", resume.

Vicente partió de Porto Alegre en el sur del país carioca hace dos meses y medio; cruzó a Uruguay y de allí a Capital Federal donde se subió a un tren hasta Lobos. La verdadera aventura en la Argentina comenzó allí cuando decidió cruzar "la pampa porque es más linda que la costa", dice. Hasta ahora pedaleó 2.000 kilómetros y el viernes salió en dirección al sur: el destino, en principio, es Ushuaia. "No sé cuando voy a llegar. Salí de casa para vivir fuera de una ciudad grande, de mi lugar de confort", repite este "gaúcho" de ojos celestes y rostro juvenil que no pierde la sonrisa a pesar de que tuvo que hacer un tramo largo entre Olavarría y La Madrid entre el barro y las vías del tren.

Aunque hace un tiempo que dejó sus cosas asegura que no tiene ganas de volver "porque este viaje me ha permitido conocer muchos lugares y personas pero por sobre todo a mí mismo".

La bicicleta en la que viaja tiene 25 años y sólo le modificó algunos elementos para poder acomodar la carga.

"En las ciudades hay violencia y la gente no te mira a los ojos… yo quiero vivir una poco más humana y disfrutar de la naturaleza", dice sobre las razones de su viaje. En julio comenzó su travesía y dejó atrás el bullicio de la gran urbe (Porto Alegre tiene casi 1.5 millones de habitantes). "El silencio me encanta y ahora puedo disfrutarlo", señala aliviado.

"La gente aquí es muy acogedora, compartimos charlas y mates. La cultura es diferente, no se me complica mucho el idioma pero sí cuando tengo que escribir", describe.

"El sur, por lo que me cuentan, es muy lindo. En Brasil hace más calor y ahora me enfrento a mucho viento, frío, las montañas y paisajes que nunca vi en mi vida", repasa sobre por qué eligió el extremo sur del continente.

Por día estima recorrer unos 50 kilómetros sin embargo el clima -especialmente el viento- decide por él.

"La Madrid me aparecía en un GPS por eso llegué. Mi día puede cambiar de un día para el otro porque no tengo un camino fijo ni una fecha prevista para llegar a Tierra del Fuego, ni siquiera sé si voy a llegar; lo mejor siempre es escuchar a los locales porque ellos saben cuáles son los mejores caminos", apunta.

Vicente lleva una especie de "diario de viaje" on line (cyclingtilltheend.wordpress.com) donde va volcando su aventura cada vez que puede.

"La bicicleta es parte de mi vida", sintetiza. Intentó estudiar derecho pero dejó porque no le gustó, trabó como vendedor, también en una bicimensajería que era una cooperativa y después en un escritorio pero siempre su cabeza estuvo sobre las dos ruedas. "La bici te muestra todo como realmente es… aunque te consume mucha energía no podría imaginar otra forma de viajar", concluye.

Ver más:
Ultimas Noticias
Otras Noticias