BASQUETBOL. El pibe de Coronel Suárez juega para los seleccionados de Olavarría Luego de entrenarse con el preseleccionado argentino de la categoría cadetes, Juan Emilio Fernández Chávez, jugador de Blanco y Negro, participó del campus de Emanuel Ginóbili.
Sin lugar a dudas que Juan Emilio Fernández Chávez no olvidará las últimas semanas que le tocaron vivir. Es que el pibe de Blanco y Negro, que juega para los seleccionados de Olavarría y es la mayor promesa del básquetbol suarense y de la región, no sólo acaba de participar de la primera convocatoria de la preselección argentina de básquetbol de la categoría cadetes, sino que inmediatamente vivió una experiencia única, junto con otros 120 chicos de todo el país, de ser parte del campus que organizó la "Fundación Manu", con la presencia del triple campeón de la NBA Emanuel Ginóbili, en el Cenard.
Con frases cortas, que le hacen un dribling a su timidez, el ayuda base o alero de 1,94 metros de estatura y 16 años de edad habló sobre lo que acaba de vivir. En primer lugar señaló sobre los entrenamientos con la preselección que "me sentí muy bien, por ahí me faltó resto físico y terminé muy cansado. Se formó un lindo grupo de chicos, todos querían ganarse el puesto, así que los entrenamientos fueron muy duros y exigentes".
Luego del Provincial de cadetes que se jugó en Mar del Plata, en el que cumplió una actuación brillante jugando para el seleccionado de la Asociación de Básquetbol de Olavarría (ABO), Juan Emilio sufrió la fractura en el cúbito, muy cerca de la articulación del codo izquierdo. La lesión lo obligó a pasar por el quirófano y a permanecer fuera de las canchas hasta poco antes de ir a entrenar al Cenard.
"El codo no me molestó para nada, pero el último día sufrí una contractura en el aductor, ya que hacía más de dos meses que no entrenaba. El nivel de exigencia fue el que esperaba. Respecto de la parte táctica el entrenador profundizó mucho más en los movimientos y los fundamentos que ya conocía, y además vi otras cosas nuevas", relató.
La convocatoria se dividió en dos etapas, la segunda de ellas, de la que participó el jugador de Blanco y Negro, fue del 30 de julio al 2 de agosto. "Anterior al nuestro hubo otro grupo, pero viendo el que me tocó a mí, creo que tengo posibilidades. No aseguro que voy a quedar, pero me tengo mucha confianza", dijo.
El campus con Manu
Tras conseguir su tercer anillo de campeón en la NBA Emanuel Ginóbili retornó al Cenard -ese que lo vio crecer desde las selecciones argentinas juveniles- para repartir su talento entre los participantes del primer campus que organizó la "Fundación Manu", del 4 a l 7 de agosto. Los campistas fueron 125 chicos de entre 13 y 18 años, provenientes de todo el país, seleccionados por la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB). Entre ellos estuvo Juan Emilio Fernández Chávez, quien tuvo la vivencia inigualable de compartir un fin de semana y aprender del bahiense.
"Un día llamaron a papá para avisarle que estaba invitado al campus que organizaba Manu, no dejamos pasar la oportunidad y fuimos. Me puse muy contento y traté de aprovecharlo al máximo. El único problema fue la contractura, que no me permitió hacer mucho, pero igual la pasé muy bien", comentó el suarense.
En el mismo sentido, agregó que "el campus estuvo basado, sobre todo, en los ejercicios de fundamentos con distintos entrenadores y también partidos cinco contra cinco y tres por tres. Nos dividieron en grupos, cada uno con un entrenador. En los entrenamientos estaba Manu supervisando todo, mirando, corrigiendo cosas. También estuvieron dando charlas Julio Lamas, Rubén Magnano, "Pepe" Sánchez, Fabricio Oberto, Gabriel Fernández, así que fue bastante lindo".
De esta manera, los campistas pudieron absorber las experiencias deportivas y conductas de vida de los campeones olímpicos. "Manu me pareció muy buena persona, muy piola. Sentí una emoción muy grande, estar ahí delante suyo, darle la mano. Fue muy impactante", admitió Juan Emilio, con evidentes signos de emoción.
Hijo de Marcelo Fernández Chávez, pivote de reconocida trayectoria en Blanco y Negro y clubes de Olavarría y Tandil, Juan Emilio sueña con su futuro. "Ahora quiero ir paso a paso y tratar de llegar lo más arriba posible, como la Liga Nacional y luego si se puede pasar a jugar a otro nivel", admitió.