El paladar lamatritense I Los responsables del restaurante Sabores & Emociones hablaron de los gustos gastronómicos en La Madrid y una propuesta culinaria innovadora para la ciudad.
Los especialistas sostienen que ha habido un cambio de hábito alimentario.
"El plato perfecto es el que te gusta a vos"
Antonio Pietravallo y Luis Ribera son los responsables de esta nueva propuesta culinaria. "Nunca nos imaginamos que iba a ver tan buena respuesta", cuentan luego de la noche que tuvo como temática principal la comida norteamericana.
El proyecto tiene algunos meses y en este tiempo tuvo una excelente repercusión entre los comensales. "Es un menú diferente al que se está acostumbrado en La Madrid. Había una ‘rutina’ gastronómica en la que se estaba inmersos en la que se ofrecían los mismos platos y alternativas desde hacía mucho tiempo, y si bien hay clásicos que no pueden faltar, lo interesante es innovar".
"A la gente hay que ofrecerle una alternativa para que no se aburra, por eso en nuestra propuesta hay platos ricos y que son típicos y, a la vez vamos, innovando a diario con recetas más revolucionarias", sostienen.
Ribera, el chef principal, se muestra sorprendido con el conocimiento culinario de los comensales y sostiene: "Es grato cuando están abiertos a nuestra propuesta que es novedosa, en la que no hay una entrada típica y sí distintas opciones". Pietravallo, el administrador, agrega que "la idea es romper con la dinámica" de las comidas "caseras" llevadas a una carta.
"Nosotros queremos innovar. Sabemos que La Madrid tiene una cultura gastronómica muy particular y arraigada por eso intentamos hacer eventos con diferentes temáticas que incluyan no sólo platos de diferentes estilos, sino también con propuestas diversas en la ambientación", adelantan. "Queremos hacer algo divertido, raro, distinto... hacer una noche con transmisión en vivo a través de la radio, una cena sin teléfonos; son ideas que van madurando gracias a la predisposición del público", cuentan.
La sofisticación del paladar lamatritense no sólo es culinaria, sino también en lo que respecta a las bebidas y son los clientes los que proponen determinadas bodegas, cortes o cervezas. "Es un lindo desafío porque son señales de que a la gente no le da lo mismo un vino que otro", indican.
El público varía en la edad, aunque los principales clientes son los mayores "que tal vez han viajado más y experimentado otras cocinas", reconocen.
"La gente estaba esperando y ansiosa a una propuesta como ésta. Inmediatamente que se lanzó la propuesta comenzó a acompañarnos y estuvo abierto a las sugerencias. Una de las primeras barreras que tuvimos fue el prejuicio de venir a cenar al hotel porque el restaurante no tiene una puerta independiente, sin embargo eso se ha ido modificando y ahora se nota mayor afluencia", señalan Pietravallo y Ribera.
La carta ofrece sólo algunos platos con carnes y varía más a otros ingredientes. "Es una decisión y una tendencia, porque aquellos que son entendidos cada vez menos optan por las carnes rojas", sintetizan sobre los gustos.
Las propuestas y las emociones tienen que ver con que "el comer no tenga que ver con algo rutinario, sino con una experiencia en la que no sólo se va a comer un plato diverso, sino también en un ambiente amable donde se debe estar atento a todos los gustos del cliente", comentan el chef y el administrador.
"El plato perfecto es el que te gusta a vos. La comida es un gusto personal, el plato perfecto no existe", concluyen.
