FUTBOL. En Colombia se jugó el primer partido de la Recopa Sudamericana
El entrenador de River, Marcelo Gallardo, afronta el primer desafío del segundo semestre, en el que se propuso renovar la mística de un equipo que llegó a enfrentar al Barcelona en la final del Mundial de Clubes 2015. "El Muñeco" apostó en Bogotá por un esquema ambicioso e incluyó en la última línea a dos de sus refuerzos, el ecuatoriano Arturo Mina y el paraguayo Jorge Moreira.
En tanto, se espera para el próximo encuentro el debut del defensor proveniente de Racing, Luciano Lollo, quien todavía se sigue recuperando de una lesión en un pie. A pesar de los 2.625 metros de altura sobre el nivel del mar, River salió al campo colombiano decidido a ser protagonista.
Más allá de su condición de visitante, se paró con valentía en campo rival y movió la pelota con prolijidad hasta que, a los 16 minutos, Sebastián Driussi disparó al ángulo derecho desde fuera del área y obligó al arquero a desviarla al corner.
A los 20’, insistió Gonzalo Martínez con un tiro de media distancia y exigió otra buena atajada de Robinson Zapata, pero a partir de entonces la intensidad del "Millonario" decreció, dando lugar a los embates de Independiente del Valle.
A falta de claridad, el local arrimó a los 28’, valiéndose de una pelota parada, la que ejecutó Omar Pérez y se escurrió entre los dedos de Augusto Batalla. Así, Dairon Mosquera tuvo una chance inmejorable y hubiese abierto el marcador de no ser por la intervención de Leonardo Ponzio sobre la línea.
Los colombianos, dirigidos por el argentino Gustavo Costas, intentaron ratificar en el segundo tiempo que atraviesan un buen momento y presionaron hasta que a los 13 minutos, Humberto Osorio disparó a quemarropa, aunque Batalla tapó bien junto al palo más cercano.
A los 20’, estuvo a punto de convertir de tiro libre Horacio Salaberry, pero el potente remate pasó nada más que cerca de la base del poste izquierdo. En definitiva, el tanteador permanece cerrado y River buscará revalidar en Núñez la victoria que logró en la temporada pasada ante San Lorenzo para adueñarse nuevamente de la Recopa y sumar su quinta copa internacional de la era Gallardo.
