Alfredo Fisher y sus sensaciones luego de aprobarse el Presupuesto bonaerense

El intendente municipal Alfredo Fisher al regreso desde la ciudad de La Plata luego de la aprobación del Presupuesto de la Provincia de Buenos Aires, brindó sus consideraciones sobre el tema, teniendo en cuenta que junto a otros intendentes del FPV tuvieron mucho que ver con el desarrollo, acercamiento de las partes y la determinación final de aprobación que tuvo el mismo.

El Presupuesto contempla un gasto de 354 millones de pesos y un aumento del 240% en la inversión real directa, al tiempo que prevé un endeudamiento de 60.000 millones de pesos, de los cuales 10.000 millones están destinados a los 135 municipios para obras de infraestructura e inversiones en seguridad. La Provincia deberá enfrentar el pago de obligaciones y equilibro de las cuentas públicas.

"Este Presupuesto le da herramientas a la gobernador María Eugenia Vidal para poder cumplir en la medida de su iniciativa y decisión con sus compromisos de campaña", expresó Fisher el viernes en rueda de prensa.

Reconoció que el tema se había vuelto preocupante dentro del grupo de intendentes con responsabilidades de gestión e incluso de discusión con los 36 legisladores de su partido que eran necesarios para aprobar el endeudamiento.

Habló de dos jornadas intensas (miércoles y jueves) de muchas "idas y vueltas hasta lograr finalmente la aprobación de nuestro bloque y que la Gobernadora tenga ese presupuesto disponible".

Y agregó: "No queríamos los intendentes peronistas empezar con nuestro rol de oposición, con una sensación de estar dificultando las herramientas de la gobernadora para que pueda desarrollarse; ahora es responsabilidad de ella", sostuvo.

El Presupuesto disparó varias cuestiones y posicionamientos. Un grupo más duro del peronismo ponía sobre la mesa las innegables deficiencias técnicas del presupuesto, presentado con una solicitud de endeudamiento de 110.000 millones de pesos -cinco veces más de lo autorizado a Daniel Scioli en su último Presupuesto- y no contaba con ninguna prescripción y detalle para que sería utilizado este dinero.

En este sentido, Fisher destacó la predisposición y cordialidad política del ministro de Gobierno, Federico Salvai, y del subsecretario de Asuntos Municipales, Alex Campbel, que aportaron información; del presidente de la Cámara, que no pertenece al mismo partido político; y además consiguieron la articulación con el ministro Lacunza, con menos experiencia de negociación política, para flexibilizar las posiciones del Ejecutivo y se logró bajar esa cifra inicial a 60.000 millones de pesos de endeudamiento.

También puso en valor haber observado entre sus pares, "como el ejercicio de la gestión hace que tengamos una mirada cada vez que estamos tratando un presupuesto, y de hecho teníamos mucha más agilidad que muchos de nuestros legisladores y por supuesto de los legisladores de la oposición y eso fue determinante", sostuvo.

"Los legisladores con fuerte oposición a no aprobar el Presupuesto tenían sus razones, porque el paquete económico técnicamente era desastroso -definió Fisher-, pero nosotros queríamos poner de manifiesto que la gobernadora Vidal llegaba recién y tampoco nos podíamos desentender de los problemas estructurales que tiene la Provincia, y eso creo que fue la clave para que se destrabara".

Comentó además que "en el futuro generará un proceso de seguimiento de las pautas establecidas, porque se constituyó un fondo, se escribió una letra en el Presupuesto donde no hubo menos de 50 idas y venidas para delinear el proyecto final que se llevó al recinto. En ese sentido no terminamos de quedar seguros, de que eso no tenga una forma de escaparse y por eso constituimos este bloque de intendentes y legisladores para darle seguimiento al cumplimiento de estos compromisos de gestión que se pautaron con el tratamiento del Presupuesto".