LAMADRID

Simón: "Los empleados entendieron que se trabaja por el bien del pueblo"

Un balance a tres semanas de asumir en la Intendencia de General La Madrid El Secretario de Gobierno analizó los primeros días de gestión. Cómo se encontró la administración municipal y cuáles son los objetivos de Cambiemos.

Aún no pasó un mes desde que Mario Simón asumió el cargo de secretario de Gobierno en la intendencia de Martín Randazzo. Para el funcionario, la nueva gestión se está acomodando a la realidad de General La Madrid y espera que en poco tiempo comience "a verse la impronta" que se le quiere imprimir: austeridad, compromiso y trabajo. "La gran mayoría de los empleados que entendió que la Municipalidad es de todos y que se trabaja por el bien del pueblo", rescata.

La administración de Cambiemos asumió el último 10 de diciembre y en este corto plazo ha debido comenzar a analizar la herencia que dejó Juan Carlos Pellitta luego de dos períodos consecutivos en el Departamento Ejecutivo y casi dos décadas de una manera de gobernar.

"Hay mucha demanda de la comunidad. La idea es atender a todos, personalmente o telefónicamente", cuenta Simón.

"Muchos han venido a pedir trabajo, también nos preguntan por las viviendas", dice sobre las demandas. "Muchas de los Promes (programa de trabajo municipal) se acercaron para preguntarnos dónde se deben presentar porque hace más de dos meses que no tienen un destino o, durante el gobierno anterior, se les dijo que no tenían que ir más a sus puestos", comenta.

Respecto a los objetivos a corto plazo, el titular de la Secretaría de Gobierno lamatritense confiesa que "se pretenden hacer muchas cosas pero en la vorágine se van solucionando las cuestiones que surgen en lo inmediato y tal vez por ello no estamos cumpliendo con objetivos que nos habíamos planteado antes de asumir, pero éste es un proceso donde se va a ir mejorando paulatinamente la situación y así poder hacer las cosas que tenemos pensadas".

"Los empleados

están colaborando"

Una de las mayores críticas que recibió la gestión del ex intendente Juan Carlos Pellitta fue el modo en que se manejó el Estado con respecto a los empleados.

-¿Cómo se encontró el Municipio?

-Uno de los mayores problemas es el de los recursos humanos y del manejo de ellos. Tenemos mucha cantidad de empleados y principalmente hemos visto que la gestión anterior no se preocupó en capacitarlos; hay pocos empleados que sepan manejar el Rafam y otras cuestiones tecnológicas, por eso es muy necesario solucionarlo.

Hubo una desidia de la Oficina de Personal y cada uno actuaba a libre albedrío: trabajadores que entraban o salían cuando querían, o faltaban cuando les parecía.

Afortunadamente, los empleados están colaborando y se les explicó desde el primer día que nosotros no venimos a romper nada ni echar a nadie, pero lo que pretendemos es que cumplan con su trabajo por la retribución que reciben. Nosotros no manejamos dinero propio, sino de los contribuyentes que pagan las tasas y contribuciones para percibir un servicio de la manera más responsable posible.

-¿En el poco tiempo que llevan en la administración se han podido observar desmanejos financieros?

-Aún no hemos visto los números detalladamente, pero hemos percibido que había un alto consumo de combustible en relación con los trabajos que se realizaban, o vehículos que han gastado lo mismo que un camión que recolecta la basura diariamente.

Hubo un manejo muy discrecional de horas extra. En 2015, la Municipalidad gastó más de 3,5 millones de pesos en horas extra, y, si bien están dentro de la ley, es un número importante y vimos que se otorgaban como forma de compensación. Ese es un punto al que hay que poner especial atención.

"Una herramienta"

Antes de concluir el 2015, el Honorable Concejo Deliberante trató el Presupuesto 2016. La bancada oficialista prácticamente no pudo detallar el proyecto, lo que le valió duras críticas por parte del FPV. Después de esta situación Mario Simón explicó cuáles fueron las razones por las que no hubo una defensa del plan; a la vez, adelantó que habrá modificaciones, se estima que en un futuro no muy lejano.

-Se discutió el Presupuesto ¿Qué análisis se puede hacer del debate y de los planteos que hizo la oposición?

-Es cierto que hubo poco tiempo para hacer un análisis del proyecto. Y la información que dijeron los concejales que no tenían sobre los recursos que deben llegar desde Provincia tampoco el Ejecutivo los tiene porque no hay un Presupuesto aprobado, y no sabemos cuánto van a llegar por la soja o qué va a suceder con el fondo educativo por ejemplo.

Fueron atinadas las palabras del concejal (Juan Pablo) Pellitta respecto a que hay mucha incertidumbre.

Pero también es cierto que la oposición intentó abusar de la falta de experiencia de nuestros concejales; se los chicaneó y ninguneó.

Por eso estuvo muy bien la actitud del bloque Cambiemos, porque el Municipio necesita el Presupuesto como herramienta para funcionar.

Esto no quiere decir que estemos de acuerdo con el proyecto que había presentado el ex intendente (Juan Carlos) Pellitta, sino que lo necesitábamos tener aprobado para, a partir del primer día hábil de 2016, empezar a introducir las modificaciones que creemos que son necesarias.

"Gobierno de

austeridad y trabajo"

Las nuevas autoridades lamatritenses asumieron en un esquema de recambio en todos los niveles. Inmediatamente, a nivel nacional, se tomaron medidas económicas que están comenzando a hacerse sentir en la diaria. El Municipio es el principal empleador de la ciudad y por eso es sumamente importante el cuidado de los recursos.

-¿Qué se puede prometer desde el gobierno a la comunidad?

-Sabemos que podemos ser un gobierno austero, que vamos a tirar hasta donde nos dé el cuero.

Sabemos que no podemos salir a hacer fiestas ni a pagar premios porque no tenemos la plata. No podemos prometer que vamos a dar aumentos descabellados porque después no los podemos pagar.

La sustancial diferencia entre la administración de Martín Randazzo y la anterior es que a la de (Juan Carlos) Pellitta no le iba a alcanzar la plata porque buscaba la forma de gastársela.

El año pasado, cuando no se aprobó el aumento de tasas, se dijo que iba a ser una debacle y que no se iban a poder dar los aumentos, sin embargo se pudo llegar a fin de año, con algunas dificultades para juntar el dinero, pero el Municipio no se cayó como se pronosticó.

Podemos prometer austeridad y trabajar en serio. La confianza del pueblo está porque en diciembre se recaudaron casi 2 millones de pesos en concepto de tasas municipales; la gente estaba esperando que entrásemos nosotros para pagar las deudas.

Se pudieron gestionar las deudas con los contribuyentes más grandes y se lograron pagar los sueldos de diciembre con lo recaudado. Esa plata es la confianza que nos dan los contribuyentes, ahora debemos trabajar de la mejor manera posible para no defraudarlos.

-¿Cuánto tiempo demandará poder encaminar el Estado como pretende el Intendente?

-No mucho tiempo. Se ven diferencias en los gastos con respecto al gobierno anterior; antes parecía no importar si algo se rompía porque se tiraba o se compraba sin intentar siquiera arreglarlo. Hoy estamos cuidando la plata pensando como si fuera nuestra. Pensamos que en septiembre se va a ver la diferencia entre la austeridad y el derroche.

No es fácil encaminar el trabajo de los municipales porque no tenemos una persona que se dedique a la tarea exclusiva y eso nos complica un poco más. Pero contamos con el apoyo de los secretarios y de la gran mayoría de los empleados, que entendieron que la Municipalidad es de todos y que se trabaja por el bien del pueblo.

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