FUTBOL. El Millonario le ganó 3 a 0 al Gamba Osaka, en Japón
Con una actuación sólida y demostrando una superioridad notable, el campeón de la Copa Libertadores y la Sudamericana se adaptó sin problemas al desgastante viaje a Japón. En el inicio del partido jugado en Osaka, el equipo de Marcelo Gallardo consiguió adueñarse de la pelota logrando que el desarrollo del juego no tenga ni velocidad, ni intensidad, características que hubiesen sido desfavorables para un River cansado, con pocas horas de adaptación y mucho calor.
La estrategia le dio resultados rápido al "millonario", pues a los 7 minutos una jugada combinada por la derecha entre Sebastián Driussi y Javier Saviola terminó en un ingreso al área de Nicolás Bertolo, a quien Keisuke Iwashita le cometió penal.
Desde los 12 pasos, el uruguayo Sánchez le dio fuerte y al medio para abrir el marcador y darle tranquilidad a River, que rápidamente dejaba en evidencias las diferencias técnicas de un Gamba Osaka muy limitado, en especial en la defensa.
El equipo argentino jugaba mejor y controlaba el juego con mucha posesión, por eso el segundo gol llegó a los 31 minutos tras un corner desde la izquierda que Gabriel Mercado mandó al gol de cabeza. En la parte final salió más decidido el Gamba Osaka para buscar el descuento y casi lo consigue con una corrida de Lins, de izquierda a derecha, pero su disparo de zurda -fuerte y cruzado- se fue cerca del palo derecho de Barovero.
Gallardo rápidamente volvió a apostar al control de la pelota para neutralizar el ímpetu del Gamba. Por eso ingresaron Tabaré Viudez, Leonardo Pisculichi y Gonzalo Pity Martínez, quienes a los pocos minutos le devolvieron a River el manejo del juego.
El tercer gol llegó a los 16 minutos con una jugada colectiva que salió del área con Mercado y que luego de una decena de pases terminó en un enganche de Pity Martínez y un zurdazo que se metió en el ángulo del arco japonés. Así, River pudo sumar un nuevo título con un copa, la Suruga Bank, que se juega a sólo un partido en tierras niponas entre el campeón de la Copa de Japón y su par de la Sudamericana, auspiciada por el banco homónimo y sólo reconocida por la Conmebol.