El lunes por la noche El cierre, en un balneario colmado de público, estuvo a cargo de Abel Pintos. Milagros Rebolo Del Giorgio es la nueva reina de General La Madrid.
Abel Pintos fue el número central de los festejos por el 125 aniversario de La Madrid.
Milagros Rebolo Del Giorgio fue coronada como reina.
Desde muy temprano el público se acercó hasta el balneario, esperando la presentación de las candidatas a Miss La Madrid y la actuación del músico bahiense.
Previo al espectáculo se eligió a la soberana de la belleza de la ciudad y el cetro recayó en Milagros Rebolo Del Giorgio (Jardín de Infantes Nº 905). Como primera princesa fue elegida Melany Correa (Sociedad Italiana) y segunda princesa María Eugenia Rodríguez (Equinoterapia El Arriero); Miss Simpatía fue Talía Celeste Valenzuela (Bomberos); y Miss Elegancia, María del Pilar Murici (Cuerpos Libres).
Las Derraperas
Gorros, vinchas y banderas. Gritos desaforados y llantos. Espuma de nieve y más gritos. Los seguidores tenían a su ídolo cerca y le demostraron su cariño cantando cada una de sus canciones.
A las 22, Abel Pintos pisó el escenario lamatritense, ubicado a metros de la ex Colonia de Vacaciones (hoy Escuela Técnica).
Los más fanáticos se ubicaron a pocos metros -inclusive algunos lo habían esperado en las afueras del hotel donde se hospedó y brindó la conferencia de prensa- y las familias se fueron desperdigando por el Parque Gil López.
El show duró exactamente una hora y media, y sumó temas de su nuevo material "Abel", además de los clásicos. El cierre fue con los tradicionales fuegos artificiales.
Del exilio a "Abel"
Sencillo, con el mate en una mano y el termo en la otra, Abel Pintos habló con los medios de comunicación de La Madrid acerca de su carrera musical, sus orígenes y su cambio con el transcurrir de los años. "Era un chico introvertido", mencionó.
"Empecé a hacer música en una edad donde no tenía ninguna otra ambición más que calmar mi ansiedad y mis emociones", contó sobre sus comienzos, hace ya 20 años.
Mercedes Sosa fue, sin que ella lo supiera en un principio, su mentora. El disco "Mercedes Sosa en Argentina", que convocó a varios artistas reconocidos -además de la "Negra"-, llevó a Pintos a introducirse en el mundo artístico. Aquel álbum apareció en los albores de la democracia del país y recopilaba las vivencias de la cantante por el mundo y el paso de los años y esos cambios que ocurren en una persona son el motor para continuar. Lo mismo le sucede a Abel que poco tiene que ver con aquel niño que con 15 años pisó Cosquín, aunque sigue disfrutando de estar sobre un escenario.
"Sigo haciendo la música porque me hace bien. La vida te reinventa y si vos estás dispuesto a hacerlo vas a ir en ese proceso", sostuvo sobre las motivaciones para continuar en el ruedo.
Aunque prefiere no encasillarse en ningún estilo, Abel Pintos sostiene que "el folklore es mi raíz. La única forma de alimentar las tradiciones es creando otras nuevas, pero eso se hace con el tiempo; no tengo intención de que mi música sea llamada de alguna forma", indicó.
"La gente viene porque disfruta de mi música, pero también del folklore que han sabido crear en sus propias giras. Aunque el momento de la música es donde mayor unión hay, son como una familia que ya trasciende lo que es el ir a ver un recital", dice sobre sus fans y agradece su constante acompañamiento.
"En un recital sos como un anfitrión. En un festival sos forastero y en esos lugares uno siente la satisfacción de que le pongan la ‘responsabilidad’ de lo que significa el evento para ese lugar", cerró.
