BASQUET

¿Qué final? ¡Gracias por el show EE.UU.!!

BASQUETBOL. Estados Unidos aplastó a Serbia 129-92 en Madrid y es pentacampeón del Mundo El estadounidense Kyrie Irving fue elegido Jugador Más Valioso y se designó al quinteto ideal: Milos Teodosic (Serbia), Kyrie Irving (Estados Unidos), Nicolas Batum (Francia), Pau Gasol (España) y Ken Faried (Estados Unidos).

¿Qué podemos comentar después de lo que se vio en Madrid? En vivo o por televisión. Poco. Las palabras salen sobrando. Compartíamos el juego con Raúl Rimoli, entrenador porteño director de Eneba de allí, que la NBA se nos volvió a escapar. Y mucho. Nadie imaginó tamaña paliza como la vista ayer de Estados Unidos a Serbia: ¡129 puntos finales y 67 en el primer tiempo!, casi un resultado de partido final, y para poco, arriba de los 100 puntos en el tercer cuarto, que yo no recuerdo haber visto eso nunca, al menos a este nivel.

Una aplanadora de la NBA, porque el básquetbol es un juego de conjunto y ellos jugaron ayer a correr y tirar, contragolpear y abusaron del uno contra uno. Bien NBA. ¿Pero a quién le importa eso? Los que estuvimos allí vimos un show de lanzamientos, robos, volcadas de tiros errados espectaculares y un partido de un tiempo.

Pero la anécdota es que enfrente estaba Serbia. Para todos el mejor equipo FIBA de las fase final, el que creíamos que iba a darles trabajo a los estadounidenses. Ayer, por momentos, parecía un equipo de formativas. ¿Se achicaron? ¿Se entregaron? No, para nada. Pasa que cuando delante tenés semejante desempeño hasta te deja en ridículo, y seguro te desanima, obviamente.

El partido parejo duró 5 minutos. Serbia sorprendió a la defensa americana con un par de puerta atrás y sacó ventajas de 15 a 7. Tiempo muerto y aluvión posterior: ajuste defensivo, 6 de 7 en lanzamientos triples, parcial de 15 a 0 de los americanos, marcador 22 a 15 y a otra cosa.

Lo demás fue seguir sacando ventajas con un rendimiento parejo de todos los jugadores, donde descollaron Irving (26) y Harden (23), pero todos aportaron al show. Curry y Rose dando cátedra de manejo del balón, velocidad y tiro, Faried y Drummond luchando los tableros, goleando y dando mates espectaculares que levantaban al público, que en definitiva, eso viene a ver, espectáculo.

Por el lado serbio, el aporte siempre infaltable de su estrella Teodosic, aunque Kalinic (18), Bjelica (18) y Bogdanovic (15) se hicieron cargo del goleo del equipo cuando los americanos dejaron de defender y Serbia pudo convertir casi todo el segundo tiempo, que sobró.

Exhibición americana. Tremendos atletas, además de jugadores de básquetbol y creo que los Estados Unidos encontraron la medida justa para competir en el mundo: un equipo de jugadores NBA de segunda o tercera línea, con hambre, disciplina y talento. No a las megaestrellas con sus egos y problemas, ni tampoco a los universitarios, que bajan mucho el potencial.

Alguien dijo en Estados Unidos, después de la Argentina olímpica en Grecia y el campeonato del Mundo de España en Japón, que estaban cansados de perder juegos olímpicos y mundiales, que se iban a preparar adecuadamente. Vaya si lo hicieron de Londres 2012 hasta acá.

Así, no se puede competir. Si juegan así es imposible, porque además sale uno y entra otro y es lo mismo, nunca decae el ritmo o la intensidad del equipo.

En definitiva, un show para deleitar a los que estábamos ahí, la posibilidad de ver eximios jugadores individuales, notables jugadas y acciones, un regalo para los que amamos ésto. Muy bien por Serbia, dignísimo rival pese al "baile". No dudo de que de los equipos FIBA demostró ser el mejor. Merecido segundo puesto, obviamente, es como ser primero frente a estos galácticos.

Aquí concluimos. Será hasta Monterrey 2015 si Dios quiere, en el difícil Preolímpico donde la Argentina buscará un lugar para Río 2016. Una empresa más que complicada, aunque Estados Unidos no jugará por ser campeón mundial. Un alivio para todas las selecciones americanas.

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