FUTBOL. El Millonario venció 1 a 0 a San Lorenzo, en San Luis, y se clasificó a la Copa Sudamericana Con gol de Germán Pezzella, el ganador del Torneo Final volvió a celebrar en San Luis en el cierre de la temporada.
El gol que sirvió para redondear una temporada reconfortante para los Millonarios lo aportó Germán Pezzella, a los 27 minutos del segundo tiempo, con un cabezazo a colocar al sacarle máximo provecho a un tiro libre lanzado con comba por Manuel Lanzini desde el sector izquierdo.
El equipo de Ramón Díaz jugó este partido por haber obtenido el Torneo Final 2014 y San Lorenzo lo hizo por haberse impuesto en el Torneo Inicial 2013. En la Sudamericana, el elenco de Núñez tendrá por primer adversario a Godoy Cruz y en la Supercopa Argentina deberá medirse con quien resulte campeón de la Copa Argentina 2014.
Por su parte, el Azulgrana tendrá en el segundo semestre del año como gran objetivo levantar por primera vez en su historia la Copa Libertadores de América, en la que lo espera como oposición próxima el Bolívar, de La Paz, por las semifinales.
Fue un comienzo parejo, en el cual ambos salieron a buscar el arco del contrario, por lo que se trató de un primer tiempo dinámico. A los 13 minutos, Daniel Villalva sacó un potente derechazo desde 30 metros que se fue muy cerca del poste derecho de Sebastián Torrico.
San Lorenzo tuvo la intención de aprovechar la velocidad de Angel Correa y Héctor Villalba por las bandas, teniendo en cuenta las escaladas de Gabriel Mercado por derecha y Leonel Vangioni por izquierda. A los 18 minutos, el Ciclón respondió con un tiro libre ejecutado por Leandro Romagnoli, que termino en las manos de Marcelo Barovero.
Un minuto después, y luego de varias desatenciones del fondo Millonario, Romagnoli disparó de derecha al ingresar al área, el balón pegó en Jonatan Maidana y obligó a Barovero a una buena intervención con su mano izquierda. San Lorenzo era más porque su mediocampo se imponía ante la dupla compuesta por Cristian Ledesma y Ariel Rojas, a quienes se observó imprecisos.
A los 35 minutos, Lanzini emuló a Villalva ya que remató desde lejos y la pelota volvió a pasar cerca del caño derecho. La segunda parte fue equilibrada, friccionada y bastante intensa, aunque también deslucida. De todos modos, River desniveló por la capacidad de Lanzini para pegarle al esférico y por la eficacia con que se desempeña Pezzella en el juego aéreo.
Una vez en desventaja el Ciclón procuró igualar, pero le faltó claridad para lograr su cometido, mientras River dio otro paso hacia su propósito de volver a ser River. Parece estar en plena reconstrucción.