Cyril Despres, con cinco triunfos en motos, tiene un desafío por demás complejo para la versión 2015 El francés confesó haber "saltado del tren" por su paso de las motos a los autos y que hace muchos años que vive pensando en el Dakar.
Cuenta este piloto nacido en Fontainebleau hace 40 años con cinco triunfos en la especialidad motos y tiene un desafío por demás complejo para la versión 2015, en la que realizará su primera experiencia en autos de la mano de una potencia como Peugeot, que vuelve al Dakar después a un cuarto de siglo de su última victoria en ese evento.
En diálogo con DyN, Despres contó cómo vive, siente y piensa el Dakar, y sus sensaciones después de "saltar del tren", tal como definió su paso de motos a autos. Además, dejó una promesa: "Dar el máximo" en la nueva etapa y "luchar para conseguir los mejores resultados".
"El Dakar es un modo de vida. Hace catorce años que vivo pensando en el Dakar, trabajando, entrenando y haciendo sacrificio para esta competencia. Es una carrera muy dura físicamente y para el deporte motor todoterreno es lo máximo", evaluó Despres, al tiempo que manifestó su deseo de que "el Dakar siga por mucho más tiempo" en la Argentina y en Sudamérica, como en las últimas seis ediciones por estas latitudes.
En 2015, el galo afrontará su debut en autos tras acumular un exitoso palmarés en motos: "Siempre en mi vida me he manejado por mis sentimientos y, después de catorce años en motos, si bien no se puede saber si me seguiría yendo bien, apareció este proyecto fuerte a largo plazo y era una oportunidad que no se puede dejar pasar".
"Es como un sueño entrar en un team de coches por esta puerta tan grande. Si bien no tenía previsto este cambio ahora, así es la vida en una profesión como ésta, única", resaltó el piloto que hizo su debut en el Dakar en enero de 2000 sobre una Honda 400 XR.
En junio comenzará su proceso de adaptación a los autos sobre un DKR 2008 que será presentado por la marca francesa el 20 de abril en el Salón del Automóvil de Pekín: "El proyecto es muy profesional y si me han elegido es porque piensan que también lo soy al momento de preparar competiciones".
"Quiero demostrar que puedo aprender y escuchar", sostuvo no sin humildad el multicampeón francés, quien manejó autos en "competencias no muy grandes ni serias" y dijo tener ganas de "comenzar la preparación y competir" con nada menos que el español Carlos Sainz, emblema del Dakar, como compañero de equipo y maestro.
No quiere pensar en objetivos el piloto que actualmente reside en Andorra, la idea es "ir y ver durante la competición" para qué está. Lo concreto es que Despres es consciente del paso que va a dar en su carrera, y así lo demostró en cada respuesta, en cada palabra que entonó con seguridad máxima.
Su compatriota Stephane Peterhansel, cinco veces ganador del Dakar en motos y otras seis en autos, bien podría ser su espejo.
Pero Despres prefiere alejarse y forjar su propio destino.
"Es verdad que los pilotos de motos que pasaron a coches lo han hecho bien y ojalá que pueda tener la facilidad que tiene él. Pero Peterhansel hay uno sólo en el mundo. De momento sólo puedo prometer que voy a dar el máximo y a luchar para conseguir los mejores resultados", concluyó el francés.
El 4 de enero próximo comenzará Despres a escribir una nueva página de su historia en el Dakar, que comenzará y terminará en la Argentina y que pasará por caminos de Chile y Bolivia.