FUTBOL. Sumó su segundo triunfo en el tercer Superclásico veraniego En Mendoza, el equipo de Ramón Díaz se impuso por 2-1 con goles de Gabriel Mercado y Teo Gutiérrez. Daniel Díaz había empatado tras un grosero error de Barovero.
River se había puesto rápidamente en ventaja, ya que, a los 9 minutos del primer capítulo, el tanto lo aportó Gabriel Mercado, de cabeza, al anticiparse a Agustín Orion tras un tiro libre perfecto de Leonardo Ponzio, quien lo ejecutó con comba y lejos de la posición del guardavalla.
Pero la igualdad provisoria la concretó, en el minuto 26 de esa etapa, Daniel Díaz, el duro zaguero catamarqueño, al disparar desde fuera del área grande y sorprender a un Marcelo Barovero que se equivocó al dejar picar el balón. Pero el nuevo desnivel lo obtuvo Teo, a los 16 del segundo episodio, al capitalizar una falla garrafal de Zárate.
El equipo de Carlos Bianchi fue más agresivo desde el comienzo de esta versión mendocina del enfrentamiento y en el primer tramo se hizo dueño de las acciones basándose en el manejo de Luciano Acosta. A los 4 minutos, tras una interesante combinación, Juan Manuel Martínez no pudo concretar la situación ante la salida de Barovero.
Pero River fue más práctico y, al disponer de una escena originada con pelota parada, Mercado conectó de cabeza y abrió el marcador. El gol pareció desorientar a Boca, pues el conjunto de Ramón Díaz generó peligro con bastante frecuencia y el capitán Fernando Cavenaghi pudo haber aumentado, a los 12’, pero el travesaño devolvió una media tijera.
Boca se recuperó con el correr de los minutos y merodeó el área del habitualmente atento Barovero, hasta que a los 26’ el portero falló ante un remate del Cata Díaz y el cotejo volvió a quedar empatado.
A los 34’ de nuevo se equivocó el arquero de los Millonarios en un córner y Leonel Vangioni salvó sobre la línea vital. El elenco de Núñez emparejó las fuerzas sobre el final de la etapa y llegó con peligro al arco de un Orion, que tuvo una noche de rendimiento inseguro, lo que fue simplemente una curiosidad, dado que en lo cotidiano suele ser toda una garantía de solvencia.
En definitiva, los archirrivales del fútbol argentino se fueron al descanso con un 1-1 que marcó con fidelidad lo que ocurrió en el primer segmento.
En la segunda parte las alternativas no cambiaron mucho, dado que los dos bandos intentaron ser prolijos, aunque hubo un leve predomino de los xeneizes. Pero de nuevo River fue el más contundente y a los 16’ Teo se aprovechó de la chance que se originó en la presión de Carbonero y la equivocación de Zárate.
Desde entonces Boca intentó remontar una vez más la situación, pero, aunque se retrasaron en demasía, los dirigidos por el riojano resistieron y celebraron por ser los dueños del verano de 2014.