Un joven estudiante de Arquitectura peruano recorrió la ciudad y destacó su calidad arquitectónica. Además valoró el trato de los vecinos.
"Dibujo las cosas que me gustan", dice con sencillez el estudiante de arquitectura que se sorprende de la calidad de los vecinos.
"Unos amigos me habían invitado a venir y recién ahora lo pude hacer. El lugar me gustó bastante, es tranquilo. Me agradó el trato de las personas, son muy amables y todas te saludan, algo que no es habitual en la ciudad que yo vivo", comenta.
Del aspecto de la ciudad rescata las construcciones arquitectónicas. "Me he encontrado con edificios que son representativos del lugar como la iglesia o el Banco Provincia. Me gusta su diseño. Por una cuestión del clima los edificios son totalmente distintos de una ciudad a otra", detalla Jean Carlos.
"El clima modela las casas y su estructura", insiste el futuro profesional que estuvo en La Madrid por unos 15 días.
"Por ejemplo -se explaya- aquí hay bastantes tormentas y lluvias y, a diferencia de lo que ocurre en Lima, donde el clima es más seco, las viviendas son con techos a una y dos aguas. Allá son totalmente planas", describe.
Otro aspecto que sorprende al joven limeño ex la proximidad al sector rural. "Están rodeados de campo que en mi ciudad no es habitual y las reservas están a dos o tres horas", exclama.
"Mi hobby es dibujar, representar lo que veo. Utilizo una técnica arquitectónica que he aprendido", cuenta Jean Carlos sobre sus dibujos y recuerda que a poco de andar por la ciudad se sorprendió por su aspecto. "Cuando llegué el lugar me encantó, no pensé que fuera tan bonito y pensé que de alguna u otra forma me lo ‘tenía que llevar’ ", menciona.
"Había venido sin mis cosas así que salí a comprar unos lápices, un par de hojas y una carpeta y empecé a caminar. Así empecé a conocer más y me di cuenta de que había edificios representativos de los cuales me gustaría llevar un recuerdo", repasa.
Pero la futura creación en blanco y negro no sólo se basará en los trazos con el carbón, sino que el joven le suma el indagar en la historia del lugar y reseña algunos de los lugares que visitó.
Como buen estudiante de arquitectura, Jean Carlos Ruiz es curioso y le gusta observar. "Analizar cómo está compuesta la estructura y tal vez criticarla", indica.
"Una foto la saca cualquiera y la perspectiva no es la misma porque se deforman los detalles", revela. Ahora, parado frente a la comisaría, busca una perspectiva diferente mientras el pueblo recién comienza a despertar de su tranquilo sueño. Algunos miran extrañados al muchacho, que no se inmuta.
"Muchos me paran y me preguntan qué hago, de dónde soy. Escucho los murmullos y comentarios. Algunos se acercan y es bonito", menciona.
"Al ser extranjero, por mi forma de hablar o por otras cuestiones, me reconocen bastante rápido pero no les parezco un extraño y me tratan muy bien, es lo que más me gusta", completa.
"El edificio que más me gustó y que tiene más trabajo es el del Banco Provincia. Es muy grande e imponente. Te llama mucho la atención por sus dimensiones. Por dentro me gustó mucho; casi no se ven edificios así. La perspectiva del centro del parque (plaza San Martín) es muy bonita", concluye.
