FUTBOL. Racing debió recorrer más de 36 mil kilómetros en las temporadas pasadas
La Argentina es diversa en climas, generosa en recursos naturales y, especialmente, extensa en territorio, un dato que a menudo no se tiene en cuenta a la hora de abrir el juego y sumar a los equipos del interior a la estructura competitiva de la Asociación del Fútbol Argentino.
¿Puede un equipo semi profesional, sin grandes esponsors, ni ayuda de la AFA y mucho menos de la televisión, transitar en dos temporadas casi 40.000 kilómetros por las rutas para cumplir con sus compromisos como visitante?
En el fútbol argentino que está bajo la órbita del Consejo Federal se puede, aunque no se debería por una cuestión de salud institucional.
Más de 36 mil kilómetros fue la distancia recorrida por Racing en las temporadas 2005/2006 (campeonato Argentino "A") y 2006/2007 (campeonato Argentino "B"). La que han cubierto la mayoría de los equipos con aspiraciones en el fútbol de interior. Un poco menos que dar la vuelta al mundo alrededor del Ecuador.
¿La recompensa deportiva? Relativa: un descenso de categoría, una final perdida, y vuelta a empezar entre 48 equipos para tratar de capturar los magros dos ascensos que esta temporada pone en juego el campeonato Argentino "B".
Como punto de referencia, este temporada el Real Madrid tendrá que recorrer en el campeonato español unos 16 mil kilómetros (ida y vuelta) y la Roma (arbitrariamente elegida, por ser del centro en un país mucho más largo que ancho) llegará a los 18 mil quinientos transitados en el calcio italiano.
Otro contexto, y otros recursos fundamentalmente.
El año pasado, luego de caminar buena parte de la provincia de Buenos Aires y de cumplir una campaña histórica, Racing debió visitar dos veces seguidas Neuquén, enlazar un viaje a Posadas, y dos semanas más tarde retornar al Alto Valle para jugar la final del campeonato Argentino "B" con Cipolletti. Para los presupuestos que se manejan parece demasiado.
Después está lo deportivo. Dentro de los tres millones de kilómetros cuadrados que tiene la Argentina, los campeonatos del Consejo Federal premia a sus afiliados con un ascenso entre los 25 equipos del Argentino "A"; dos para los 48 participantes del campeonato Argentino "B" y 3 para los casi 250 equipos que juegan el Torneo del Interior.
Ese enorme gasto que los clubes deben realizar en viajes, alojamientos y estadías por un lado, y por el otro ofrecer logros quiméricos deberían obligar a un replanteo en las competencias del CFFA.
Primero que nada para evitar que se terminen fundiendo la mayoría de los clubes, y en el plano deportivo para achicar la distancia entre los desafíos y las metas.
Se podría plantear si es lo más conveniente tomar el mapa de la República Argentina como distrito único, con ascensos y descensos concentrados en una sola competencia.
Quizás sea el momento de revitalizar los certámenes regionales, o estaduales en el caso de provincias como Buenos Aires, Córdoba o Santa Fe, que tienen un peso demográfico importante.
Por qué no plantearse si se justifica seguir como hasta ahora, o no sería mejor cambiar todo lo establecido por primeras divisiones provinciales que reemplacen al Argentino "A", una segunda de ascenso que ocupe el lugar del Argentino "B" y jerarquizar las incipientes integraciones de ligas a un nivel de terceras categorías.
Menos gastos y más incentivos: tres ascensos y descensos entre las categorías, y dejar la competencia nacional sólo para que los cinco o seis campeones provinciales y/o regionales junto con el ganador de la B Metropolitana se junten para disputar dos ascensos a la B Nacional (campeonato subvencionado por la TV).
Esto fortalecería la autonomía de las provincias o las regiones, una cuestión que tiene que empezar a tomar fuerza en el fútbol del interior.