Se reunió la Comisión de Emergencia local y hará el pedido formal a las autoridades provinciales. La zona más afectada es la lindera a Laprida, Olavarría y el arroyo Salado. Prevén pérdidas tanto en sembrados como en las explotaciones vacunas.
En los próximos días las autoridades municipales elevarán la intención a las provinciales.
Según se pudo establecer, en el encuentro mantenido entre los referentes gubernamentales locales y del sector de la producción se determinó realizar una evaluación más exhaustiva y se pediría la emergencia agropecuaria para varios Cuarteles. Además se dejaría abierta la posibilidad a propietarios de otra zona del distrito para que se sumen a la solicitud.
Los referentes de la Sociedad Rural de La Madrid y del sector agroganadero coinciden en que habrá que esperar algunos días para conocer la realidad de los daños, pero adelantaron que el agua ha provocado problemas en algunas explotaciones.
Las áreas más comprometidas son las lindantes al partido de Laprida, Olavarría y las que están sobre las márgenes del arroyo Salado.
Consultados diversos ingenieros agrónomos concuerdan que "los campos que están en La Colina y Líbano no tienen mayores inconvenientes, pero los que están desde el Ameghino para el norte tienen mucha agua y las napas están muy altas".
Respecto a cuáles podrían ser las consecuencias suponen que los sembrados de cebada, por ser una semilla "frágil" van a sufrir "problemas importantes". "El trigo es un poco más resistente, pero todo depende del tiempo que estén bajo agua", comentaron.
En el sector de la producción donde ya se sabe que hay inconvenientes es en el ganadero ya que es época de parición y muchos terneros se han ahogado.
"Las pasturas están siendo pisoteadas por los animales y probablemente se pierda una parte importante de ese alimento", alertó Jorge Lago. "Las consecuencias se van a ver en algunos días y después de las pariciones", advirtió el propietario de la firma consignataria.
"Tampoco se pueden sacar los animales de los campos, así que lo único que puede hacer el propietario es esperar", se lamentó.
Este ha sido un año irregular en cuanto a las precipitaciones. Había iniciado con una fuerte sequía; posteriormente llegaron las lluvias y nuevamente la falta de agua.
Así y todo el panorama climático venía favoreciendo a las explotaciones. En el mes de agosto, los más de 200 milímetros, sorprendieron a todos. Ayer a la tarde, como se preveía, volvieron las lluvias.