Se realizó en VII Encuentro de Escuelitas de Fútbol organizado por Racing. Hubo pequeños de La Madrid y la zona.
Quien dio la bienvenida a las delegaciones fue Ignacio Ciolli, titular de la entidad albiceleste quien reconoció el esfuerzo de los clubes para viajar y a los jugadores del club que colaboraron al oficiar de "árbitros". Recalcó que "esto (por el encuentro) nos hace crecer". Además subrayó que "más allá de lo deportivo, sirve para que ustedes chicos pasen un lindo día".
"No hay ganadores ni perdedores, lo importante es participar y conocer chicos de otras ciudades", remarcó el titular del club anfitrión.
Además del equipo anfitrión, estuvo presente Ingeniero y Barracas (La Madrid), las escuelitas de La Colina y San Jorge, Lilán (Laprida), Racing, Ferro y Embajadores (Olavarría).
En el predio racinguista se hicieron presentes el presidente de la Liga Lapridense de Fútbol, Marcos Lacal y el responsable del área de deportes local, Dardo Núñez.
La delegación más numerosa fue la de Racing (O) que superó el centenar de niños en competencia. La más pequeña fue la de San Jorge con 12. La de La Colina tuvo la particularidad de incluir a niñas en sus equipos.
Los partidos se disputaron tanto en la cancha principal como en la auxiliar de Racing. Separados en equipos de 8 integrantes, se disputaban a un tiempo de 15 minutos cada uno. En total 420 chicos de entre 6 y 11 años se dieron cita en el encuentro, divididos en categorías según la edad.
Cuando se organizaron los visitantes se les proporcionó el desayuno, que habían preparado las madres de la subcomisión del fútbol infantil racinguista, y antes de la entrega de premios recibieron una merienda.
Desde temprano el público acompañó en una importante cantidad, inclusive llegados desde las ciudades vecinas a La Madrid. Una familia hasta llevaba un trailer para mayor comodidad.
La lluvia del miércoles había amenazado con aguar la jornada pero al final salió el sol y a pesar del viento y el frío de la mañana se pudo ver disfrutar a los niños, correteando detrás de un balón; contentos.
Estaban más preocupados por divertirse y saludar a un padre que sacaba una foto que por marcar goles y prestar atención a las indicaciones de los entrenadores.