FUTBOL. Perdió 2 a 0 ante Belgrano en Córdoba por la Promoción
El partido de anoche estuvo suspendido durante 20 minutos del segundo tiempo (desde los 7'' a los 27''), luego del gol de Pereyra, por el ingreso de una decena de hinchas de River al campo de juego para agredir a sus futbolistas y reclamarles mayor actitud, toda una síntesis del momento institucional y deportivo que vive el club de Núñez.
La revancha será el domingo desde las 15 en el estadio Monumental de Núñez: allí, River deberá ganar por al menos dos goles de diferencia para no descender por primera vez en su historia a la segunda división del fútbol argentino. El partido, como era previsible, arrancó tenso, parejo, con dominio alternado en el mediocampo. Hubo, en esos minutos iniciales, imprecisiones en los pases de uno y de otro y una serie de simulaciones que el árbitro Pitana, con acierto, ignoró.
River tuvo una excelente oportunidad de despojarse de los nervios a los 3'' cuando Funes Mori, solo en el área, cabeceó flojo un córner de Lamela y permitió la reacción de Olave. Y el local respondió a los 6'' con un tiro libre de Mansanelli, de un ángulo cerrado desde la izquierda, que Carrizo devolvió con los puños.
El zaguero paraguayo Adalberto Román cometió mano en el área, Pitana (tardó unos segundos) cobró el penal correspondiente y Mansanelli lo cambió por gol con un remate fuerte, bajo, a la derecha de Carrizo. Desde allí los de Ricardo Zielinski apostaron decididamente al contragolpe, y si no le salió ninguno es porque River no atacó.
El "Negro" López apostó al ingreso de Caruso por Mauro Díaz para el segundo tiempo, pero antes de comprobar la eficacia de su medida sucedió lo peor: el "Picante" Pereyra puso el 2 a 0, sobre la línea de meta, luego de un cabezazo en el área de Lollo.
Lo inmediatamente posterior fue insólito: una decena de hinchas de River rompió el alambrado, ingresó al campo de juego y, con ademanes notorios, le reclamaron mayor actitud a sus futbolistas. Pitana paró el partido hasta que la Policía le dio las garantías para seguir (pasaron 20 minutos). Belgrano se refugió cerca de su área y aguantó el final para el delirio de su gente.