Federico Imaz habla La Madrid El líder del PRO en La Madrid analiza los resultados del censo 2010 y da su opinión sobre el futuro del pueblo.
"Siempre creí que un pueblo cuyas únicas ''industrias'' eran la Municipalidad, la obra pública financiada por la Provincia, y un campo que sobre todo en su faz ganadera produce mucho menos de lo que puede, estaba condenado al estancamiento y a contemplar, en consecuencia, cómo sus hijos emigran en busca de un mejor futuro en otros lares", sostiene.
"Cómo hacer, me preguntaba, para saber si lo mío era una simple sensación, es decir una impresión subjetiva y además muy sesgada por mi concepción política-ideológica, o si por el contrario era una realidad incontrastable. Para resolver este dilema recurrí a la biblioteca del Indec en Diagonal Sur de Capital Federal y requerí los datos poblacionales de La Madrid. Ahí se terminaron las dudas, desgraciadamente".
Según los datos que recabó, "en 1991 éramos 10.641 vecinos, en el 2001 llegábamos a 10.984 y en el 2010 somos 10.747. Esto significa que en 20 años, de 1991 a 2011, se incrementó el número de vecinos en 107 almas. Pero lo alarmante es que en el 2001 éramos 10.984 y ahora somos 10.747, es decir que en los últimos 10 años perdimos 237 personas".
"Pero la cifra se torna decididamente dramática cuando vemos cuál es el incremento vegetativo de la población del país, y cuál debería ser la población de Gral. La Madrid si hubiese crecido al ritmo que crece la población de la Argentina", sostiene.
"No hay dudas entonces de que La Madrid está estancado y de que mientras sigamos apostando al empleo municipal y a la obra pública el deterioro se irá incrementando. No estoy en contra de la obra pública, digo que con ella no alcanza. Finalmente se va a dejar de hacer barrios porque estando la población estancada finalmente no va a hacer falta construir más casas", analiza.
"Cuando lleguemos a ese punto la pérdida de población se acentuará. Eso siempre y cuando el momento no se adelante porque la Provincia deja de financiar. Si hoy se para la construcción de barrios estamos en un problema serio", indica.
"Pero ya que estaba en la biblioteca del Indec y que la empleada se mostraba tan amable, le pedí los mismos datos pero de Daireaux, de Laprida y de Coronel Suárez", prosigue Imaz.
"En el ´91 Daireaux tenía 14.694, en el 2001 eran 15.857 y en el 2010 llegan a 16.804. Esto significa que mientras nuestra población creció en 20 años exactamente el 1%, la de nuestro vecino lo hizo en el 15%, de 14.694 a 16.804. Coronel Suárez en el mismo período pasó de 35.710 a 37.766, es decir que se incrementó en el 6%. Laprida pasó de 9.322 en el ´91 a 10.188 en el 2011, creció su población el 9%".
"En el ´91 éramos 1.319 vecinos más que Laprida hoy sólo 519 y si la tendencia continúa en el 2021 ellos serán más que nosotros. Laprida en el 2001 tenía 9.683 vecinos y en el 2010 tiene 10.188, es decir que en los últimos 10 años su población creció en 505 almas. Nosotros en el mismo período, es decir en los últimos 10 años, en cambio perdimos 137 vecinos", continúa analizando.
"Ahora, si nosotros vamos a seguir decreciendo como lo hemos hecho en los últimos 10 años donde perdimos 237 habitantes, Laprida en el 2030 será una ciudad sensiblemente más grande que Gral. La Madrid. Repito: nosotros en los últimos 10 años perdimos 237 personas, ellos incrementaron su población en 505".
"Queda claro que es absolutamente necesario elaborar un Plan Sugestivo de Vida en Común que ponga el acento, no en el empleo municipal y en la obra pública, sino en el incremento de la producción ganadera así como en la financiación y apoyo a pequeños emprendedores, y en la localización de empresas en el Parque Industrial", destaca.
"Estos datos desmienten aquello de que el mejor intendente es el que más obras hace. Si así fuera en estos 20 años que gobernó Pellitta, que fueron justamente los años en que más obra pública se ha realizado, y en el que más se incrementó el número de empleados municipales pasando de 400 a 800, la población no se hubiese mantenido estancada como se mantuvo".
"Tenemos, en términos proporcionales, el doble de empleados que Coronel Suárez. Sin embargo nuestra población decrece y la de Suárez aumenta", concluye Federico Imaz, referente del PRO en La Madrid.
