En el último tiempo se pasó de atender 2 mil consultas por mes a alrededor de 7 mil. "La urgencia y emergencia está cubierta al instante, lo que demora es lo que tiene que ver con la consulta", aclaró.
El desborde en el Hospital de Pediatría durante el fin de semana puso el foco en un problema que afecta a Olavarría desde hace varios años. La ausencia de guardias pediátricas privadas provocan que el sistema público desborde.
El servicio de Pediatría del Hospital Municipal pasó de atender 2 mil consultas a 6 o 7 mil mensuales en el último tiempo. "Hemos ido reforzando con postas de bronquiolitis con otro médico, hace poco empezamos a reforzar con un tercer médico en la semana. Pero lo que sucede es que es la única guardia de asistencia tanto del ámbito público como privado", señala Rosana Della Maggiora desde el equipo de gestión de Pediatría.
La demanda es muy alta: atendemos más de 200 por día y asistimos todo lo que es demanda estacional como cuadros febriles, bronquiolitis, neumonía o gastroenteritis. Se suma lo que es patología de urgencia como accidentados, traumatismos, fracturas, causas quirúrgicas y a su vez también pacientes de la ciudad que son complejos, que tienen enfermedades oncológicas y demás que también necesitan su atención especial".
La internación también se ve incrementada, "con un promedio de 25 pacientes internados diariamente", explica mientras aclara que "la urgencia y emergencia está cubierta al instante, lo que demora es lo que tiene que ver con la consulta".
¿El fondo de la cuestión? "Está la predisposición de Salud Pública de incrementar el número de médicos, pero no tememos más. Esa es la falencia. Somos un equipo constituido. Actualmente estamos con médicos que son residentes. Algunos que terminaron se han ido a otras especialidades y este año no ingresó ningún residente nuevo que esté en formación y permita generar un nuevo recurso humano para la especialidad", plantea.
A raíz de la situación vivida el fin de semana, desde la coordinación de Pediatría del Hospital Municipal conducida por Rosana Della Maggiora, el pronóstico no promete mejorar. Y el problema radica "en la elección de la especialidad por parte de los estudiantes y residentes".