En el marco de las actividades tratamentales que se llevan adelante en los establecimientos penales bonaerenses. Matías Abelairas compartió su experiencia con los internos de la Unidad Nº 27.
Matías Abelairas brindó recientemente una charla a los internos alojados en la Unidad Penitenciaria Nº 27 de Sierra Chica en el marco de las actividades tratamentales que se llevan adelante en los establecimientos penales bonaerenses.
El actual jugador de El Fortín fue recibido por el subdirector de Seguridad Prefecto Mayor Pablo Avila, el Coordinador General de Educación, Cultura y Deportes del Complejo Penitenciario Centro Zona Sur, Prefecto mayor Alejandro Luján, el profesor de Educación Física Subprefecto Martín López, el subjefe de Asistencia y Tratamiento Subprefecto Luciano Moulins y varios agentes que se acercaron a conocerlo personalmente y saludarlo.
La charla fue gestionada a través de Moulins, quien es amigo íntimo del deportista y en un trabajo conjunto con el área de deportes de la Unidad, luego de analizar la cantidad de internos que participan en la práctica del fútbol, oscilan entre 30 y 40 por día, propusieron a los directivos la idea de convocar a Abelairas para incentivarlos.
Desde la Dirección de la Unidad la propuesta es trabajar fuertemente en los procesos de tratamiento destinados a que los internos mejoren sus hábitos para una vida saludable, física y mentalmente. En la actualidad, de los 188 detenidos, cerca del 70 por ciento realizan actividades deportivas como bochas, tenis criollo, fierros, atletismo y fútbol.
"A los 12 años vinieron a Olavarría a buscarme de River, club del cual soy hincha, mis padres no me permitieron irme, pero a los 13 llegué a la pensión del Millonario junto a otro montón de pibes llenos de sueños. El mío estaba bien claro: quería llegar a la primera división; el camino no fue fácil y mis viejos me acompañaron mucho. Fue un recorrido largo donde muchos chicos lamentablemente quedaron en el camino, River es un club muy grande", contó el jugador frente a un auditorio ávido de su historia.
"Si tuviera que decir cómo llegué hasta acá, diría que tuve mucha constancia, trabajo y esfuerzo, todo lo que logré fue gracias a eso. Mucha fortaleza en la cabeza, disciplina, esas fueron las claves. Saber lo que uno quiere y no bajar jamás los brazos, redoblar entrenamientos y reforzar el cuerpo", comprometido en cada una de sus palabras llegó al corazón de internos y agentes que lo escuchaban.
Una de las anécdotas que generó más y más preguntas fue el haber compartido la cancha con Messi. "Jugué con Messi cuando él tenía 16 y yo 19, ni lo conocíamos, recién había llegado de España, estaba en las inferiores del Barcelona. En el entrenamiento no podíamos creer lo que jugaba, calladito, re humilde, la rompió en los dos partidos que jugamos juntos, metió dos goles terribles frente a Paraguay y dos frente a Uruguay. A los dos meses arrancó en la primera del Barcelona. Me quedó la anécdota de haber compartido la cancha con él", relató.
Además, Abelairas indicó que "disfruto mucho jugar en el Club El Fortín, donde me inicié, ahora en primera división, en mi ciudad y con mi gente". Luego de la charla, que duró alrededor de dos horas, el futbolista compartió un refrigerio con los internos y los agentes penitenciarios, firmó remeras, se sacó fotos y videos en un clima de calidez y cercanía.
Luciano Moulins, en nombre de la Unidad 27, le entregó un diploma de agradecimiento por haber brindado su tiempo y experiencia a los internos y también un bolso matero confeccionado por uno de los internos fiel hincha de River.
Para finalizar, Matías Abelairas se despidió con el compromiso de regresar para jugar con sus compañeros de El Fortín en la cancha central de la Unidad que se encuentra en plenos trabajos de reacondicionamiento.